martes, mayo 14, 2024
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“Lo bello solo tiene una forma, lo feo tiene mil”

Victor Marie Hugo fue un notable escritor de la lengua francesa y universal. Novelista, poeta, dramaturgo y político influyente, dedicó su vida a enriquecer la historia de Francia. Fue un destacado intelectual del Siglo XIX, amante de la vida, y de su intrincada aspereza; se inspiró fundamentalmente en los problemas sociales de aquel entonces, haciendo de su obra una majestuosa reflexión social.
Nacido el 26 de febrero de 1802 en Besanzón; diez años después de las Masacres de septiembre, pasó gran parte de su infancia en París, una ciudad marcada por actos salvajes. Su padre fue el general del Imperio Joseph Léopold Sigisbert Hugo y su madre fue Sophie Trébuchet, una mujer comprometida con su labor de madre. Los frecuentes viajes de su padre le abrieron un extenso panorama a un joven Victor, conociendo más a fondo otras sociedades como la napolitana y la española.
Empezó a componer versos de manera autodidacta, se sumergió en mares benditos de poesía, componiendo su primer poemario denominado “Cuaderno de versos francés”. A partir de este punto comenzaría el romance entre Victor Hugo y el arte de la escritura. La muerte prematura de su madre afectaría al novel poeta, pero la resiliencia de su alma vate hizo que compusiera “Odas y Poesías diversas”, en menos de cuatro meses 1500 ejemplares terminarían por agotarse.
En 1822 se casó con su amiga de infancia, Adèle Foucher, con quien tuvo cinco hijos. Ese mismo año redactó su primera novela “Han de Islandia”, fue el inicio de su consagración como un gran maestro del Romanticismo, en esta obra manifiesta la fascinación por los contrastes existentes en la eterna lucha entre el bien y el mal. Por desavenencias del destino; Victor Hugo se alejó de su padre, pero llegaría el momento de la reconciliación, lo que inspiró los poemas “Odas a mi padre” y “Après la bataille”, su progenitor fallecería en 1828.
Después de aquel lamentable desenlace, iniciaría una de sus mejores épocas en cuanto a producción literaria se refiere, en 1829 publica “Los orientales” que fue una colección de poemas exquisitos. El mismo año sale a la luz “El último día de un condenado a muerte”, considerado por muchos como la primera obra de madurez de Hugo, por ser un alegato en contra de la pena de muerte.
La novela “Nuestra Señora de París” (1831); compuesta por once libros, es una verdadera obra de arte, un sublime modelo del Romanticismo. Tras la separación de su mujer, el solemne novelista presenció el rechazo de sus contemporáneos hacia el arte gótico de la ciudad de París, donde se fomentaba la demolición de estructuras emblemáticas. Molesto e incómodo por semejantes acciones aberrantes que dañaban al patrimonio artístico de su país, vio la oportunidad de reflejar su preocupación por medio de una extraordinaria novela y así convencer al pueblo parisino que era un grave error desmoronar portentosos monumentos.
Victor creó los personajes más cautivantes, reflejó a la perfección el infortunio del amor no correspondido y las historias trágicas de los amantes empedernidos, en una ambientación renacentista donde resaltaba los edificios y fachadas góticas, en especial la icónica catedral de Notre Dame. Trabajó aproximadamente seis meses en dicha obra; sin descanso, tanto fue así que terminó por debilitarse físicamente. Finalmente, el esfuerzo mereció la pena, la obra fue bien recibida por críticos y ciudadanos, esto incitó a la valoración de las construcciones francesas.
El teatro fue otra de sus pasiones, fue entre los años 1830 y 1843 que se dedica exclusivamente a ello. Inicialmente obras como “Marion de Lorme” y “El rey se divierte” fueron prohibidas aludiendo inmoralidad, esto no fue así pues la verdadera razón fue por ser una obra antimonárquica y suscitar el tiranicidio. En este ambiente es cuando conoce al amor de su vida, su amante y compañera, la actriz Juliette Drouet, a quién le dedicó numerosos poemas.
Educado por los ideales de su madre bretona, siempre mostró inclinación por la política y convicción hacia la democracia, hizo varios discursos al respecto; posteriormente llego a ser diputado de la Segunda República. Durante el golpe de Estado del 2 de diciembre de 1851, se exilia voluntariamente en Bruselas, fue en este periodo que publicó varios panfletos condenando al transgresor.
Los años difíciles siempre fueron muy fecundos para Hugo, publicó obras como “Los miserables” (1862), “Los trabajadores del mar” (1866), entre otras obras que hasta hoy nos deleitan. El gran dramaturgo falleció el 22 de mayo de 1885, pero es el 1 de junio del mismo año cuando es finalmente conducido al Panteón de París. Su escritura fue lo más hermoso, inspirado en la crudeza de la vida, en miles de bestias trágicas y demonios danzantes, prueba inherente de la dualidad de la vida.

El autor es Comunicador, poeta, artista.

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