Gobierno insiste en jubilación forzosa ante incapacidad para generar empleo

Preocupado por el creciente conflicto por las reformas a la Ley de Pensiones y los intentos del poder para forzar una jubilación a los 65 años para todos los trabajadores, el diputado por Comunidad Ciudadana (CC), José Luis Porcel, señaló que el Gobierno recurre a este tipo de medidas para ocultar su incapacidad para generar nuevas fuentes de empleo.
Porcel cuestionó que mediante una normativa ampliamente rechazada por sectores de la sociedad, se trate de forzar la jubilación para trabajadores que están en condiciones de seguir aportando con su conocimiento en distintos rubros.
“El Gobierno pretende que a partir de un artículo, las personas con 65 años se jubilen, está bien, pero ¿para qué se hace esto?, para que a la gente que no se le puede crear fuentes de trabajo se los meta en eso”, indicó.
Puntualizó que según las características de cada área, las capacidades de los trabajadores se incrementan o disminuyen dependiendo de su edad y experiencia, por lo que la jubilación forzada no debería ser una disposición obligatoria, como propone el Gobierno, sin hacer un análisis previo de cada rubro.
“Hay profesiones en las que se puede aportar más a partir de los 60 años, es el caso de los médicos, los profesores universitarios y otros. Los que pueden aportar deberían quedarse dando clases, escribiendo libros y demás, eso sería productivo para el país, pero querer tomar una medida radical no me parece”, dijo.
En criterio del asambleísta, las justificaciones para la aplicación de estas modificaciones a la Ley de Pensiones, continúan siendo sesgadas, sobre todo si se toma en cuenta que la jubilación, en el caso de los militares, es al 100% de su salario, mientras que para otros trabajadores el monto del beneficio es completamente reducido.
Otro aspecto observado por el asambleísta tiene que ver con la pérdida del poder adquisitivo de la moneda nacional y la falta de políticas destinadas garantizar que los ahorros de los aportantes mantengan su valor en el tiempo.
Porcel cuestionó que la instancia encargada de administrar los aportes de los trabajadores sea el mejor ejemplo de las desigualdades en el país, donde trabajadores con cargos políticos tienen acceso a un sueldo muy por encima de cualquier otro trabajador.
Esta semana, el sector médico a nivel nacional, uno de los más perjudicados por la disposición de jubilación forzosa, insertada en el Proyecto de Ley de Modificación a la Ley de Pensiones, cumplió un paro de 72 horas exigiendo respeto a su rubro y demandando retirar el polémico artículo de la normativa señalada.
“Estamos desde hace un año, con el Gobierno, tratando de solucionar este conflicto. No hay voluntad, por eso se determinó, a través del Consejo Nacional de Salud, un paro de 72 horas”, indicó Daniel Cazas, dirigente de la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública de Bolivia.
La medida fue respaldada por el Magisterio Urbano que acompañó con marchas de protesta en todo el país, con la participación de los nueve departamentos y 21 regionales con sus federaciones.
El presidente del Colegio Médico de Bolivia, Carlos Iriarte, indicó que el sector no rechaza todo el proyecto de ley, sino la disposición de la “obligatoriedad de jubilación a los 65 años”, previa evaluación física y mental.
Desde el oficialismo, la diputada Deisy Choque, negó que con la aprobación del Proyecto de Ley 035 se obligue a una jubilación forzosa a partir de los 65 años; aclaró que la normativa garantiza una jubilación digna, ya que una persona podrá jubilarse a los 58 años, con un fondo solidario y una renta mayor a la que realmente se calcula.
Asimismo, sostuvo que las personas que cumplan 65 años y no quieran jubilarse, tienen la opción de realizarse una evaluación médica; y si el resultado determina que el profesional está en condiciones para ser maestro, médico y realizar atenciones quirúrgicas, puede continuar ejerciendo sus funciones, lo que desmiente que dicha ley obligue a una jubilación forzosa.