jueves, mayo 2, 2024
InicioSeccionesOpiniónAumento de olas de calor marinas impactaría en cadena alimentaria

Aumento de olas de calor marinas impactaría en cadena alimentaria

André Juliao

Parte II

 

UN FUTURO MÁS CALUROSO

En un estudio anterior, Costa y el en ese momento maestrando Juan Carlos Farias Pardo demostraron el efecto de la elevación de temperatura sobre los embriones de la misma especie (Leptuca thayeri). En la actualidad, Farias Pardo es doctorando en la Universidad de Agder, en Noruega.

En esa oportunidad, los investigadores observaron que, en la referida etapa de la vida, no solamente el agua más caliente, sino también la mayor acidez, disminuyen la sobrevivencia (lea más en: agencia.fapesp.br/36130/).

En el estudio actual, del cual Farias Pardo también es coautor, no se observó una diferencia significativa en la supervivencia de las larvas debido al aumento de la acidez del agua, pero sí se notaron alteraciones fisiológicas. Los pronósticos para las próximas décadas apuntan una disminución del pH marino, lo que ha de afectar a muchas especies.

“Por estar en los estuarios, ambientes que naturalmente experimentan grandes variaciones de acidez, probablemente esta especie soporta algún incremento de ese parámetro”, estima Marochi, actualmente profesor colaborador en la Universidad del Estado de Paraná (Unespar), en la localidad de Paranaguá (Brasil)

No obstante, y al igual que el aumento de temperatura, la acidez elevada acelera los latidos cardíacos, una señal de estrés fisiológico, y disminuye la movilidad de esos organismos.

“Nadan menos y pueden no lograr permanecer en la capa de agua más cercana a la superficie, donde viven las microalgas con las cuales se alimentan”, explica.

Por ende, los efectos de las olas de calor marinas serían perjudiciales para esta especie y para las que se alimentan de la misma, lo que podría traer aparejadas pérdidas económicas en la pesca, por ejemplo. Así y todo, no existen estudios que confirmen una merma de las existencias de Leptuca thayeri durante los últimos 20 años.

Para los autores del estudio, esto puede ser el resultado de otros factores que compensan esas alteraciones. Por ejemplo, el hecho de que el aumento de la temperatura del agua puede acortar el tiempo de desarrollo larvario de estos crustáceos y exponerlos así durante menos tiempo a sus predadores y a condiciones ambientales severas.

Además, el aumento de la temperatura puede acarrear una mayor producción de las microalgas y los microorganismos que les sirven de alimento a las larvas de Leptuca thayeri y de otras especies. No obstante, nuevos estudios deberán analizar si este factor puede o no compensar el aumento de la mortalidad de las larvas… (Agencia FAPESP).

ARTÍCULOS RELACIONADOS
- Advertisment -

MÁS POPULARES