sábado, mayo 4, 2024
InicioSeccionesDeportesSALOMÓN, UN CABALLERO INTACHABLE

SALOMÓN, UN CABALLERO INTACHABLE

Se dice que es “intachable” aquella persona de la que no se admite ningún reproche; que por su calidad de ser humano, al hacer una evaluación de su vida, no tiene ninguna tacha.
El fútbol profesional boliviano tuvo a un deportista que se ajusta de manera fácil a este denominativo; él es Salomón Enríquez Carrasco.
“Quisiera que la gente me recuerde cumpliendo mi sueño de niño, haber llegado a jugar en mi querido club The Strongest y haber salido campeón de la Liga Profesional del Fútbol Boliviano, convirtiendo el tercer gol en la final, frente a Oriente Petrolero en el estadio ‘Félix Capriles’ de la ciudad de Cochabamba , en marzo de 1987 (…)”, comienza su relato, hoy con 65 años de edad y una trayectoria que la recuerda casi día a día, ahora que se dedica al transporte Sucre- Aeropuerto- Aeropuerto- Sucre.
Con el cabello rizado que lo caracterizaba, ahora caneado, pero con el mismo estilo, el lateral izquierdo que regaló la brillantez de su juego en los más importantes clubes del país, tiene una gran parte de su corazón teñido de “amarillo y negro”.
En diálogo con RETRO-FÚTBOL, de manera calmada y muy amable recuerda que su romance con el balón comenzó cuando apenas tenía siete años en su Mojocoya natal, hermosa y fructífera ciudad de Chuquisaca.
“Empecé a jugar en seleccionados de mi querida escuela ‘Daniel Calvo’, posteriormente en selecciones de mi colegio ‘Nacional Junín’. Así pasé a equipos del fútbol amateur en infantiles, terceras de ascenso, segundas hasta llegar al Botafogo de primera. Fui seleccionado en varias oportunidades en divisiones menores”, recuerda.
Salomón tiene entre sus principales virtudes humanas la modestia ante la gran carrera que hizo: debutó en la Primera División del Fútbol Chuquisaqueño en el Club Junín (Sucre), el año 1975, fue campeón nacional juvenil con la selección de Chuquisaca en Tarija esa misma gestión, campeón nacional juvenil con una selección en representación del Litoral Boliviano en la ciudad de Sucre el año 1976 en los añorados “Segundos Juegos de la Juventud”.
En 1978 -1979 jugó en el Club Independiente Petrolero de Sucre. Su debut en la Liga Profesional del Fútbol Boliviano fue vistiendo la “celeste” de Bolívar en el año 1980, donde permaneció hasta 1984. Con la “Academia” fue campeón nacional en 1982. Hizo el segundo gol de la victoria en la primera final frente a Wilstermann.
“Con Bolívar participé en la Copa Libertadores de América contra Brasil, equipos Gremio y Flamengo ese año. Tres años después en el mismo torneo frente a los equipos chilenos Universidad Católica y Hogiguins. Aunque tuve un paso por Chaco Petrolero y Ciclón de Tarija en 1986 llegué a mi club The Strongest, cumpliendo un acariciado sueño”, afirma.
Con la “atigrada” de sus amores salió campeón en 1986 y volvió a participar en la apreciada Copa Libertadores de América, esta vez contra los equipos colombianos América y Deportivo Cali (1987).
En 1987- 1988 defendió la banda roja de Always Ready y un año después volvió a Sucre para ser el capitán de Universitario. Igual función cumplió en 1990 en Independiente Petrolero y acabó su carrera futbolística en el club Orcobol de Cochabamba 1991.
“Tengo la alegría de decir que por dos décadas estuve en la actividad del fútbol, 12 años dentro de la Liga Profesional del Fútbol Boliviano y 8 años en Asociación Chuquisaqueña de Fútbol”, remarca.
En el año 2003 Chuquisaca le devolvió, en parte, un poco de lo que hizo por este departamento, cuando en el Estadio Olímpico Patria el hincha le dijo “gracias y adiós” con un cerrado aplauso que hasta ahora retumba en este escenario deportivo de la Capital.
“En la vida nada es imposible. Cuando uno quiere, realmente lo puede todo. A pesar de los obstáculos que uno puede tener. Con dedicación y disciplina se logra todo”, asegura quien además de gran futbolista es un ejemplar esposo, padre y abuelo.
Enríquez es también egresado de la carrera de Administración de Empresas de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz y tiene la satisfacción de haber cumplido, de manera excelente, como padre de familia de cinco hijos.
“Tengo la dicha de haber formado un hogar muy lindo con mi adorada esposa Ana María Ramallo quien me dio cinco amados hijos que a su vez me regalaron cuatro hermosos nietos. Ellos son mi motor”, afirma con la voz quebrada de tanto cariño.
Para este “crack” el practicar deporte es fundamental para la juventud boliviana y haciendo una comparación entre el fútbol que se practicaba en su tiempo y el de hoy asegura que “el de ayer era de mucha más calidad gracias al esfuerzo individual que se desplegaba en la cancha”.
“Lamentablemente hasta ahora no destaca el fútbol boliviano a nivel internacional porque uno de los factores es la diferencia en la inversión de los clubes grandes respecto a otros de Sudamérica. Por ejemplo, un River Plate, Boca Juniors, Peñarol, Flamengo… en fin. Sin embargo, lo positivo es que ahora en todos los departamentos de nuestro país existen escuelas de fútbol; un muchacho de 14 o 15 años ya tiene un guía o empresario que hace el seguimiento de dicho jugador para poder acomodarlo en un determinado club”, reflexiona.
Para finalizar la amable entrevista otorgada a EL DIARIO, Salomón Enríquez expresa su esperanza de que Bolivia vuelva a clasificar a una Copa del Mundo.
“Creo que todos los bolivianos así lo deseamos y si voy a anhelar algo para mi es tener salud y fuerzas como hasta ahora que sigo jugando, hasta que Diosito me lo permita porque el fútbol es mi pasión y lo será por siempre. ¡Viva el fútbol toda la vida!”, concluye.
Mientras que los amantes del fútbol boliviano en todo el territorio le agradecen por tanto, a este caballero intachable de la “atigrada”, cuya ejemplar vida y calidad humana se inscriben con letras mayúsculas en la historia positiva de nuestro país.

“En la vida nada es imposible. Cuando uno quiere, realmente lo puede todo”

FICHA
Nombre: Salomón Enríquez Carrasco
Lugar de nacimiento: Mojocoya, Chuquisaca
Fecha de nacimiento: 13 de marzo de 1957
Lugar actual de radicatoria: Sucre (Chuquisaca)
Actividad actual: Transporte
Familia: Ana María Ramallo Yucra (esposa), Ana María, César Luis, Nataly Ghamell, Salmón Junior y Andrea Alejandra (hijos). Sarah Elizabeth, Pablo David, Leandro Mateo y Mateito (nietos)

GHILKA SANABRIA

ARTÍCULOS RELACIONADOS
- Advertisment -

MÁS POPULARES