Ahora el escándalo de la Policía Nacional es por robo de vehículos en Chile. Si lo hacen en territorio extranjero, ¿qué podemos esperar de la Policía en el país? Dos altos jefes policiales son descubiertos por este robo de motorizados. La prensa informó que se trata de Rolando Téllez, ex Director de Diprove de Santa Cruz y del coronel Raúl Cabezas Pantoja, jefe policial de Uyuni. A éste se le atribuye el ilícito de un Mitsubishi Outlander encontrado en un inmueble de su propiedad y trasladado a otro del que también es propietario, encontrado mediante GPS. Otros vehículos de parecida mala procedencia en el país, eran ofrecidos con precios irrisorios en la Feria de Movilidades de Yapacaní. Según el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, uno fue destituido y otro puesto a disposición de los mecanismos policiales internos de investigación. Además, el ministro dispuso el cambio del 100% del personal de Diprove Santa Cruz. Ojalá esta medida no sea el simple cambio de distrito.
La denuncia provino de un medio de comunicación chileno. El ex carabinero Hugo Bustos tiene a su cargo un grupo que colabora en la ubicación de motorizados robados del vecino país. Informó que cursan en su poder unas 120 denuncias de vehículos secuestrados en Chile por presuntos bolivianos. Estos escándalos protagonizados por policías son un dolor de cabeza no solo de las autoridades sino de todos, pero nadie “le pone el cascabel al gato”.
Hace poco quedó al descubierto la desaparición de 800 kilos de cocaína de un comiso de mayor cantidad. Se dice que los presuntos oficiales del caso guardan detención. Por supuesto que no es la primera vez. En otro caso de narcotráfico, se ordenó no intervenir unos laboratorios de producción en el Chapare, orden impartida por autoridades de represión al ilícito. Eso es solamente la punta de un iceberg gigantesco que hunde a la Policía. Con intervalo de pocos días son descubiertos en el Verde Olivo más y más casos.
Todos o casi todos los comandantes de la FELCC han salido por vínculos o complicidad con traficantes de droga. Los directores de la FELCC por extorsión a delincuentes y otros, varios de éstos en Santa Cruz. En lo interno, por cobros a sus camaradas para asignación o cambio de destinos. Además de sobornos, desde los guardias policiales de calle y los de Tránsito. Salvo honrosas excepciones, que las hay. El drama se inicia con los postulantes a estudiar la carrera, por la compra de las preguntas de examen, etc. Ese es el ambiente en que se inicia este servicio. Es muy lamentable expresarlo. En suma, hay impunidad en las distintas unidades y luego en el Ministerio Público y en la Justicia, a cambio de dinero. Esto y más ocurre en el país, donde todo se vende y todo se compra, para vergüenza de la ciudadanía honesta.