viernes, abril 26, 2024
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El mapa mental cómo herramienta para vencer exámenes

Por: Equipo editor

 

¿Qué es el mapa mental?

 

Es un diagrama usado para representar palabras, ideas, tareas, lecturas, dibujos, u otros conceptos ligados y dispuestos radicalmente alrededor de una palabra clave o de una idea central. Los mapas mentales son un método muy eficaz, para extraer y memorizar información. Son una forma lógica y creativa de tomar notas, organizar, asociar y expresar ideas

 

Características de los mapas mentales

 

  • Las ideas y conceptos son representados mediante imágenes o símbolos y palabras claves. Es muy importante el uso de colores para destacar y acentuar las ideas, de esta forma estimulamos a nuestro cerebro a crear nuevas conexiones.
  • Las ideas de menor importancia dentro del esquema, corresponden a ramificaciones secundarias, las cuales se desarrollan a partir de aquellas ideas principales que están directamente vinculadas al tema central.
  • Generalmente, el tema central se representa con una imagen ubicada justo en el centro del diagrama.
  • Mientras más lejos se encuentre un bloque de ideas del eje central, menor será su importancia dentro del diagrama.
  • De la imagen central del tema irradian los demás conceptos e ideas en forma de ramificaciones, en el sentido de las agujas del reloj.
  • Mientras más lejos se encuentre un bloque de ideas del eje central, menor será su importancia dentro del diagrama.
  • Cada una de las ideas principales se acompaña de una imagen o palabra clave ubicada en su línea asociada.
  • Poseen una estructura orgánica radial, compuesta por nodos conectados entre sí.

 

Usos de los mapas mentales

 

Los mapas mentales tienen muchos usos aplicativos en los ámbitos personal, familiar, educacional y empresarial; incluyendo la toma de notas, la Lluvia de ideas, la realización de resúmenes, como herramienta nemotécnica o como medio para explicar ideas complejas. Además los mapas mentales se pueden analizar con los métodos clásicos de extracción de información para clasificar el mapa mental de un autor o los documentos que se enlazan desde el propio mapa.

 

Los mapas mentales ayudan a:

 

  • La retención natural y práctica de mucha información comprimida en unas cuantas palabras, dibujos, señales, letras, colores, etc.
  • La expansión de la memoria.
  • La recopilación sencilla y flexible de datos clave facilita los procesos de aprendizaje, pensamiento, ordenación, creación y rememoración.
  • Se usan en presentaciones laborales, trabajos educativos y tareas escolares.
  • Facilitan el estudio de temas complejos y difíciles de entender.
  • Estos explican en poco tiempo visual lo que hojas llenas de información escrita pudieran lograr.

 

Todos los mapas mentales tienen elementos comunes. Cuentan con una estructura orgánica radial a partir de un núcleo en el que se usan líneas, símbolos, palabras, colores e imágenes para ilustrar conceptos sencillos y lógicos. Permiten convertir largas y aburridas líneas de datos en coloridos diagramas, fáciles de memorizar y perfectamente organizados, que funcionan de forma totalmente natural, del mismo modo que el cerebro humano.

 

Beneficios de los mapas mentales

 

  • Facilita la memorización de contenidos cargados de grandes bloques de información, pues se trata de simplificar el contenido del tema a tratar, manteniendo las ideas principales de manera gráfica.
  • Optimiza y facilita la toma de notas y apuntes, puesto que en un corto tiempo permite plasmar ordenadamente una gran cantidad de información.
  • Permite tener una perspectiva diferente o una visión más general de un tema específico, ya que un mapa mental facilita la visualización de un tema completo.
  • El uso de imágenes y figuras permite dar fuerza a las ideas que se desean plasmar y que estas adquieran un carácter simbólico.
  • Puede ser utilizado durante el proceso de brainstorming (lluvia de ideas) para organizar las ideas.
  • Ayuda a mejorar la creatividad puesto que no tiene una estructura lineal, las ideas fluyen con mayor rapidez y libremente, lo que permite hacer relaciones rápidas entre los conceptos y las imágenes con las que se quiere plasmar dichos conceptos.
  • Es una herramienta efectiva para el aprendizaje de contenidos de manera más simple y dinámica.

 

Diferencias entre un mapa mental y un mapa conceptual

 

A pesar de que ambas herramientas están orientadas a mejorar el aprendizaje mediante la representación de ideas de forma dinámica y esquematizada, es importante entender que no es lo mismo un mapa mental que un mapa conceptual.

 

Distribución de las ideas

 

En un mapa mental, las ideas no deben plasmarse estrictamente de manera cíclica; mas en el mapa conceptual, los conceptos o ideas clave deben seguir un orden secuencial, de manera que la composición adquiera un sentido lógico.

 

Estructura

 

Un mapa mental posee una estructura orgánica radial que parte de un núcleo o tema central, donde las ideas o conceptos se encuentran relacionados por medio de líneas, símbolos e imágenes; a diferencia del mapa conceptual, que posee una estructura en la cual los bloques de ideas o conceptos se encuentran vinculados por líneas interrumpidas por preposiciones o palabras enlace.

 

Colores y apariencia

 

Generalmente, los mapas mentales emplean un gran número de colores, lo que les permite ser altamente efectivos en términos de apreciación visual. Esto difiere de la estructura de los mapas conceptuales, la cual se caracteriza por ser un poco más neutral y emplear una cantidad de colores muy reducida.

 

Imágenes o representaciones gráficas

 

Se consideran elementos clave para hacer un mapa mental; sin embargo, no suelen tener lugar en la composición de un mapa conceptual, donde se emplean únicamente palabras o conceptos breves, que se asocian para explicar el contenido de determinado texto.

 

Pasos para elaborar un mapa mental

 

Paso 1: Define y ubica la idea principal

 

Primero colocar el título en el centro de la hoja. Este se refiere a la idea central del trabajo. Debe ir acompañado de una imagen que cause impacto y permita al lector saber cuál es el tema, con solo recibir esa primera impresión del mismo. Sin recibir más información que esa, el lector asume que se tratará de estrategias para manejar las emociones (corazón) de una forma más racional (cerebro) y, de esta forma percibe la información más importante de manera inmediata, que determinará su interés en el resto del mapa mental.

 

Esta representación gráfica del título no tiene que ser necesariamente muy compleja, puede ser sencilla pero explícita.

 

Paso 2: Organiza los Subtemas

 

Comienza a trazar a partir del título, en orden de relevancia y en sentido de las agujas del reloj, una serie de ramificaciones gruesas llamadas subtemas, las cuales se refieren a aquellos aspectos generales que brindarán información específica al lector. Esta parte dependerá de cómo se desee estructurar el mapa, qué tipo de información se quiera brindar y en qué puntos se enfocará el contenido. Los subtemas o ramificaciones principales son siempre palabras claves y genéricas.

 

Paso 3: Desglosa los subtemas

 

A partir de los subtemas comienza a separarse la información específica ramificada, disminuyendo un poco el tamaño de la letra a medida que se plasma información más puntual, cuidando que siga siendo legible. Acompaña cada elemento con una imagen o símbolo que la identifique, así como flechas para ayudar a relacionar las ideas de ser necesario. Se puede desglosar ramificaciones las veces que se necesite, recordando que la idea es simplificar lo más que se pueda el contenido. Evitar oraciones o frases largas. Generalmente se mantiene siempre el mismo color para indicar al lector que la información pertenece a una misma ramificación.

 

Paso 4: Utiliza diferentes combinaciones de colores

 

Es recomendable usar más de tres colores diferentes en un mapa mental para causar mayor impacto en el hemisferio derecho del cerebro y así retener y comprender la información de forma efectiva. Se sugiere utilizar el rojo y el naranja para el título o el centro de tu mapa mental, colores tibios como el verde y el marrón para las ramas secundarias y colores fríos como azul y blanco para las ramas más lejanas. Lo más importante, es que a pesar de tener bastante información y contenido gráfico, entre cada subtema y ramificación se mantiene un espacio adecuado, las letras son legibles y poseen un buen tamaño para su fácil lectura, lo que hace que se pueda apreciar mucho mejor la creatividad del autor y que el lector pueda sentirse interesado en el contenido sin distraerse.

 

Paso 5: Ensayo y Error

 

Lo interesante de un mapa mental es que produce en el creador un Brainstorm o “lluvia de ideas”, esto significa que sus ideas irán surgiendo a medida que vaya trabajando en el mapa, por lo cual es totalmente normal que aunque se esté terminando, se haga modificaciones por ocurrencias de último momento. Por tal razón se sugiere realizar primero un borrador.

 

Otro modelo para la elaboración de un mapa mental

 

Un mapa mental debe comprender el menor número de palabras posible, por lo que es importante emplear únicamente palabras o frases clave, así como también imágenes o figuras que ayuden a representar cada conjunto de ideas. Por lo que ahora se presenta otra opción para la elaboración de un mapa mental.

 

Paso 1. Inicie colocando la idea central o foco temático, justo en el centro de la hoja de papel. Considere que esta puede estar representada bien sea por palabras o por algún dibujo que haga referencia al tema a tratar. Es recomendable utilizar una imagen para representarlo y acompañarlo de una palabra clave.

 

Paso 2. Partiendo de la idea central remarcada en el centro de la hoja, desarrolle a su alrededor el resto de las ideas relacionadas con el tema.

 

Paso 3. Para establecer un orden jerárquico entre cada una de las ideas, desarrolle las mismas en el sentido de las manecillas del reloj. Tenga en cuenta que aquellas ideas que se encuentren ligadas al foco temático de manera directa, tendrán prioridad sobre las demás; mientras más alejada se encuentre una idea del tema central, menor importancia tendrá dentro del esquema.

 

Paso 4. Utilice líneas para establecer la relación entre el foco temático y el resto de las ideas desarrolladas a partir de este.

 

Paso 5. Puede destacar las ideas encerrándolas en alguna figura, como óvalos o cuadrados, resaltándolas con lápices de colores, imágenes o cualquier elemento que le permita diferenciarlas entre sí y comprender la relación que hay entre ellas; solo use su creatividad.

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