domingo, mayo 19, 2024
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Barreras de exclusión educativa

Francisco Condori Mamani

En nuestro país la educación básica todavía no es un derecho de ejercicio universal. Tampoco la igualdad de oportunidades para una educación de calidad, que permita satisfacer las necesidades básicas de aprendizaje de los estudiantes, a fin de que tengan una vida digna, en una sociedad más justa y equitativa. Persisten diversos tipos de exclusión, a pesar de medidas para reducir la deserción escolar.
Identificar y visibilizar los factores de exclusión, es imprescindible para la promoción de espacios socioeducativos que potencien una educación digna y de calidad para todos los estudiantes. Las diferencias que existen dentro del sistema educativo plurinacional, en general, limitan el desenvolvimiento en igualdad de condiciones y oportunidades.
En los diferentes centros educativos, se visibilizan manifestaciones de discriminación por razones de género, origen, color, discapacidad y lengua, las que obstaculizan el desarrollo de los estudiantes. El maltrato físico y psicológico ejercido por algunas/os educadores son problemas latentes. La falta de ítems para maestras/os en el área rural, la carencia de educadores que impartan educación plurilingüe, la ausencia de visión de una educación inclusiva, la poca disposición de bibliotecas, la falta de infraestructura adecuada para escuelas masificadas en áreas urbanas, la excesiva cantidad de estudiantes por profesor, el horario de clases reducido por varios turnos escolares en el mismo centro, son problemas generales que vulneran el derecho a la educación.
El sistema educativo plurinacional, todavía no cumple plenamente con las mencionadas características Las barreras de exclusión se mantienen. Aunque la educación fiscal está normada como gratuita, las familias tienen que financiar la compra de material educativo, uniformes, pagos por transporte, gastos que se multiplican según el número de hijas/os en edad escolar y obligan a que algunos estudiantes abandonen la escuela. La situación general de pobreza, también exige que niñas y niños ingresen al mundo laboral para aportar al mantenimiento de sus hogares, quedando fuera de la escuela.
La discriminación de género sigue presente en el currículum oculto, que mantiene estereotipos respecto a los roles tradicionales de mujeres y hombres, Se menosprecia las capacidades y aporte social de las mujeres, por lo que el sistema educativo sigue reproduciendo y perpetuando la discriminación. Entre otros rasgos, deriva en serios problemas la calidad de la educación actual.
En conclusión, debemos desarrollar una educación inclusiva, para que los estudiantes aprendan juntos e independientemente de su origen, sus condiciones personales, sociales y culturales, incluidos aquellos estudiantes con cualquier dificultad de aprendizaje o discapacidad. Se debe tratar de que la escuela no ponga requisito de entrada, ni mecanismo de selección o discriminación de algún tipo, para hacer realmente efectivos los derechos a la educación, a la igualdad de oportunidades y a la participación, desde una perspectiva plural y diversa.

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