Luego de ser aprehendido ayer, en horas de la madrugada, por asesinar y agredir sexualmente a una mujer de su misma edad, un sujeto de 23 años confesó que previamente asesinó a otra mujer y la enterró en su licorería, arguyendo que deseaba experimentar qué se sentía matar; la Fiscalía de Santa Cruz investiga el caso como doble feminicidio.
El examen forense determinó que ambas víctimas murieron por asfixia mecánica y estrangulación. El cuerpo sin vida de la víctima más reciente, Carla D. M., fue encontrado cuando el agresor, Cristian F. C., intentaba esconderlo.
Asimismo, una denuncia de los vecinos habría movilizado a que la Fiscalía Especializada en Delitos Contra la Vida se constituya al lugar, de donde se había alertado que emanaba un fuerte olor nauseabundo.
Según informó la Fiscalía, el hombre confesó haber ingerido bebidas alcohólicas con Carla, a quien mató para sostener relaciones sexuales. En el lugar se encontró, además de los dos cuerpos, una pala y una picota, informó el fiscal departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca.
En cuanto a la primera mujer, el feminicida sostuvo que de ella solo recordó el nombre y que fue asesinada y enterrada hace una semana en una habitación del domicilio, ubicado en el barrio Las Moritas de la capital cruceña, donde funcionaba una licorería.
Un especialista en análisis criminal relató a Red Uno que la conducta del sujeto permitió evaluar que padece trastorno de personalidad antisocial. (Santa Cruz, EL DIARIO y agencias)