El inicio del Campeonato de la División Profesional 2023 está en duda, después de la reunión que sostuvieron la mayoría de los capitanes de los 17 clubes y de la cual salió la determinación de “paralizar el inicio del torneo de manera indefinida”, hasta que la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) cumpla con sus demandas y se retire la denuncia contra el dirigente David Paniagua Yépez.
“Ante la falta de voluntad de la FBF de cumplir los acuerdos y las normas, la cumbre de capitanes resuelve paralizar el inicio del torneo de manera indefinida hasta que se den soluciones a todos los planeamientos y se retire la denuncia falsa presentada en contra de nuestro secretario General, David Paniagua Yépez”, fue la resolución que leyó Erwin Romero, secretario Ejecutivo de la agremiación, la noche del lunes.
La reunión fue convocada con carácter de emergencia luego de que, en horas de la mañana, Paniagua fue aprehendido por efectivos de la Fuerza Especial Contra el Crimen (FELCC) en Santa Cruz, dentro de la investigación por el presunto delito de estafa con agravación de víctimas múltiples por la demanda interpuesta por la familia del entrenador Marcos Ferrufino (+). El dirigente de los futbolistas fue trasladado a El Alto, donde radica el caso.
Entre las conclusiones emitidas por la Federación Sindical de Futbolistas Profesionales de Bolivia, se pide a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) respetar con el convenio, firmado el 12 de noviembre de 2021, con los jugadores, como el cumplimiento de los fallos del Tribunal de Resolución y Disputas (TRD), la aplicación del reglamento de licencias de clubes y resolver las deudas de los clubes con los deportistas.
El incumplimiento de estos puntos fue denunciado a FIFPRO World, presidida por David Aganzo, quien participó en la reunión de los capitanes, y de acuerdo con el abogado de la agremiación, Luis Caballero, este reclamo provocó un movimiento dentro de la FBF y generó la aprehensión de Paniagua “de manera ilegal, sumado a los convenios incumplidos”, agregó. (APG)