El presidente Luis Arce Catacora, durante su permanencia en Santa Cruz, con motivo de las celebraciones por los 212 años del grito libertario de este departamento, sostuvo de manera clara “que la coordinación y los espacios de diálogo, más allá de las diferencias político-partidarias, en temas que son de interés del pueblo, fortalece la democracia y mejora la gestión como lo estamos demostrando”.
Los empresarios bolivianos no solo coincidimos con el diálogo y la concertación planteadas por el Primer Mandatario, sino que estamos convencidos de que esta es la única manera de asegurar un crecimiento económico sostenido, que asegure el bienestar de todos los bolivianos.
El hecho anecdótico de esta feria fue el éxito que tuvo la venta de la marraqueta –el pan de batalla de consumo masivo en La Paz-. El primer día de la feria se agotaron 3.000 unidades en menos de un par de horas. El tercer día ocurrió lo mismo con las 6.000 unidades que llevaron.
Esto nos está demostrando de manera muy gráfica que los bolivianos tenemos la capacidad de producir, lo que nos falta son los mercados.
La primera tarea del gobierno sería, buscar los mercados que aseguren la venta de la variada producción nacional, y así seguir elevando el superávit comercial.
La segunda tarea del gobierno es otorgar la seguridad jurídica que demanda el inversor. Esto permitirá que el capital privado nacional y extranjero opte por invertir tanto en los proyectos que tiene el Gobierno como en otras iniciativas privadas.
La locomotora económica es Santa Cruz y es impulsada por su sector privado. El presidente Arce fue claro al afirmar que “con su crecimiento, Santa Cruz se convierte en el primer departamento que recupera y supera los niveles de actividad económica que tenía antes de la pandemia”.
La Paz no debe quedarse atrás. Su sector privado está haciendo los esfuerzos necesarios para salir adelante. La Expocruz fue un ejemplo.
La activa participación de los gobiernos subnacionales, en cooperar con el sector privado, se apreció en forma clara en esta oportunidad
Las alcaldías de La Paz y el alto, además de la Gobernación paceña hicieron posible la presencia de una parte del sector productivo de la Sede de Gobierno en la feria cruceña.
Las instituciones paceñas participantes en esta feria manifestaron su complacencia por estar presentes: Iván Arias, alcalde paceño, fue claro al afirmar que la Expocruz “es el símbolo de cómo la economía nos puede unir, de cómo la cultura nos une”.
Eva Copa, alcaldesa de El Alto, señaló que la Expocruz “es una forma de integrarnos los bolivianos. Cada vez que llego veo a mis colegas, es donde nos encontramos todos los alcaldes, la verdad es que este es un gran ejemplo de impulsar la economía del país”. Esta autoridad remarcó al afirmar que El Alto y Santa Cruz tienen complementariedad y que no debería haber una “pared” de separación, discriminación y racismo. “Si bien en Santa Cruz se centraliza el poder económico, allí (municipio alteño) tenemos el poder social y político”.
La gobernación paceña pagó todos los gastos necesarios para participar de la feria, a 18 empresas que estuvieron en Expocruz, las que previamente fueron capacitadas para participar de la rueda de negocios, como parte del plan de reactivación económica del gobernador Santos Quispe.
Esta feria, organizada por la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), tuvo la participación de 21 representantes de otros países y más de 2.000 marcas expositoras, y es una de las actividades más esperadas por empresarios bolivianos.
La Rueda de Negocios Internacional de la Expocruz logró intenciones de negocios por algo más de 100 millones de dólares, superior a los montos alcanzados en años anteriores y a sus propias previsiones para este año.
Señor presidente, los empresarios bolivianos estamos en total acuerdo en que debemos dialogar en forma sincera y abierta, sobre todos los temas que son de interés del pueblo boliviano, y de esta manera fortalece la democracia y mejora la gestión, para beneficio de todos los bolivianos, sin distinciones de ninguna naturaleza.
El autor es Economista, doctorado Ph.D. en Relaciones Internacionales, Académico de Número de la ABCE y presidente del Directorio de la UREAL.