Ven contundencia en respuesta de Unión Europea a discurso de Arce

Tras la respuesta del Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Común, Josep Borell, rechazando las acusaciones del Gobierno sobre la participación de este organismo en el supuesto golpe de Estado de 2019, analistas coinciden en señalar que la posición fue contundente y pone en evidencia el plan del oficialismo para posicionar la teoría del golpe en todo ámbito.
Analistas consultados por EL DIARIO aseguran que la respuesta de la Unión Europea a las recientes acusaciones del presidente Arce han sido las más contundentes hasta el momento, reiterando que en el 2019 no hubo un golpe de Estado como se plantea con insistencia desde el oficialismo.
Para el analista Carlos Cordero, se trata de la primera vez que desde esta instancia internacional se manda un mensaje claro y contundente, descartando el supuesto golpe de Estado.
“Es una de las primeras veces que la Unión Europea se pronuncia con tanta claridad y contundencia, sin embrago, de parte del gobierno estas aclaraciones sobre lo ocurrido en octubre del 2019, han servido para confirmar que el MAS, con Evo Morales, han decidido posicionar a toda costa esta teoría del golpe”, sostuvo
Similares criterios fueron expresados por José Luís Bedregal, quien cuestionó la “ligereza” con que el gobierno boliviano actúa en escenarios internacionales con la finalidad de posicionar un discurso, hecho que tiene un costo para el país.
“La respuesta de la UE es contundente, es sólida y marca un mayor distanciamiento con el Estado boliviano, porque lo que Bolivia necesita son más facilidades, apoyo e inversiones. No necesitamos estar pelados con las potencias del mundo”, afirmó.
Sostuvo además que las recientes acusaciones del Gobierno boliviano contra la UE no solo dañan relaciones entre Estados sino pueden llegar a afectar posibles inversiones extranjeras, que en el último tiempo se han reducido. “Estos distanciamiento innecesarios van en desmedro de los bolivianos”, dijo.
Para Cordero, los impases del gobierno masista corresponden a una “polémica de sordos” pues el régimen y Evo Morales continuarán con su estrategia de posicionamiento alrededor del supuesto golpe en 2019, en tanto que la Unión Europea volteará la página y continuará con el apoyo al país y la región en distintos ámbitos.
Finalizó advirtiendo que el partido oficialista no demuestra tener la menor intención de cambiar en su discurso, por lo que la reciente controversia puede repetirse en el futuro y otras instancias.
“Mientras el MAS esté en el poder, va a seguir insistiendo en su punto de vista y serán otros tiempos y otras generaciones las que cuenten los hechos de manera imparcial y no de la forma en que se lo hace en la actualidad”, afirmó.
El jueves, mediante su cuenta oficial en la red social Twitter, el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Común, Josép Borell, rechazó las acusaciones del Gobierno boliviano sobre la supuesta participación de este organismo internacional en el golpe de Estado de 2019, argumento que es posicionado por el oficialismo para perseguir a opositores.
“Rechazo con firmeza acusación de supuesta participación de UE en un golpe de Estado en Bolivia en 2019. La UE ayudó en los esfuerzos para evitar violencia y promover diálogo. La UE trabaja por una relación constructiva con Bolivia basada en un respeto mutuo”, señala el mensaje compartido por Borrell y replicado posteriormente por la cuenta oficial de la Misión de la Unión Europea en Bolivia.