El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, el economista Luis Arce Catacora, declaró públicamente: “lo más bello de ser socialista, comunista, izquierdista, es el sueño que tenemos (…). Seguramente cuando Arce estudiaba la carrera de Economía en la Facultad de Economía y Finanzas de la UMSA, se saturó de las ideas del socialismo marxista, que difundía el decano de esa Facultad, Eduardo Nava Morales, y que muchos economistas tomaron como ideología, aunque muchos otros profesionales, después dejaron de lado esta corriente de pensamiento.
Es que en buena medida el discurso teórico del marxismo, se basa en el determinismo económico de la propiedad de los bienes de producción, de tal manera que, según esta teoría, existen dos clases: propietarios y trabajadores, los primeros se hacen ricos por la “plusvalía”, lo que da lugar a la lucha de clases. Así Marx y Engels sostenían que la historia no es sino, la historia de la lucha de clases, entre los detentadores de los medios de producción y los que venden su fuerza de trabajo. Se construyó la teoría del materialismo histórico (teoría socio política) y del materialismo dialéctico (filosofía). Como sabemos, esta teoría expuesta desde 1848 dio lugar a la revolución rusa de 1917 y perduró hasta la caída del muro de Berlín en 1989.
En nuestro continente americano, quedan como resabio los regímenes del partido comunista o socialista en Cuba, Venezuela, Nicaragua y algunos otros autodenominados izquierdistas, aunque más que socialistas son regímenes dictatoriales-personales, de caudillos entornillados en el poder, mientras sus pueblos padecen de los rigores de la pobreza, con el ejemplo de la más antigua, Cuba (al que Arce Catacora dice admirar) que desde 1959 se ha impuesto un régimen que ha establecido una dictadura de partido y caudillo. Según el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) en su VI informe (2023), levantado en 75 municipios, se establece que en la isla una familia de tres personas apenas vive con l.90 dólares diarios.
De acuerdo con ese estudio, el 62% de los cubanos tiene problemas, incluso para acceder a lo más esencial, con una elevación de 11 puntos más que en una anterior encuesta de 2022. El 68% de los entrevistados calificó como muy negativa la gestión de gobierno y un 86% valora como deficiente la labor de gobierno en lo económico y social. En general el estudio determina que el 88% de los cubanos vive en extrema pobreza. (Infobae para EL DIARIO).
El experimento socialista marxista en el mundo, en especial luego de la Segunda Guerra Mundial, en la que casi la mitad del mundo en varios continentes optó por el socialismo, liderado por la ex Unión Soviética (URSS), luego de setenta años, se derrumbó cual castillo de naipes, luego de la caída del muro de Berlín. Sin embargo, sus restos y efectos todavía se mantienen en algunas regiones, donde se han instalado regímenes autoritarios, liderados por excomunistas, exguerrilleros, exterroristas, con ropaje supuestamente democrático hasta tomar el poder y luego quedarse en el mismo en nombre del pueblo, cuando en verdad el pueblo resulta el más perjudicado.
No cabe duda que en las décadas de los sesenta y setenta del pasado Siglo XX, en los medios académicos, profesionales, sindicales, la mayoría de los individuos se declaraba de izquierda, aunque no fuese la socialista de la dictadura del proletariado, sino más bien, una postura hacia los demás, para ser considerado de ideas “avanzadas”. También algunos jóvenes tomaron las armas y pagaron con sus vidas la aventura de instalar el socialismo, como la solución a las diferencias entre pobreza y riqueza, como los que se incorporaron en nuestro país a la guerrilla del “Che” Guevara y la de Teoponte, en las que se perdieron valiosas vidas.
Ya lo dijo en la antigua Hélade el sabio griego Aristóteles, refutando al colectivismo de su maestro Platón, que propuso en su teoría de la República, la no propiedad privada: “la propiedad privada y la familia, son de la naturaleza de los individuos (instinto)”, siendo esta una de las causas del fracaso del régimen socialista-marxista. El destacado estadista inglés Winston Churchill sentenció: “dicen que el socialismo busca la igualdad, sí, la igualdad en la pobreza”.
Los dos presidentes del régimen del Movimiento al Socialismo, Morales Ayma y ahora Arce Catacora, son los primeros presidentes en la historia política del país, en declararse socialistas, comunistas, izquierdistas. El sueño del presidente con el socialismo, puede ser un mal sueño, como son los resultados del socialismo en Venezuela, Cuba y Nicaragua.
El autor es Abogado, Politólogo, escritor y docente universitario.