En cuatro meses y bajo la gestión de Israel Huaytari a la cabeza de Diputados, los parlamentarios de la Cámara Baja ganaron un total de Bs 16.777.856 en salarios, equivalentes a más de 2.4 millones de dólares, de acuerdo con información de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP); desde que Huaytari asumió la presidencia en noviembre de 2023, solo se realizaron seis sesiones plenarias.
Las tres fuerzas políticas en el Legislativo estarían en evidente crisis y con grietas insalvables. Ese factor, según expertos, ocasionaría una escasa coordinación en temas legislativos. El Movimiento al Socialismo (MAS) presenta dos facciones, una que responde al presidente del Estado, Luis Arce, y otra al jerarca del partido azul, Evo Morales.
Por otra parte, en Comunidad Ciudadana (CC), existirían críticos hacia su líder, el expresidente Carlos Mesa, mientras que otros todavía seguirían al exmandatario. La alianza política Creemos también se encontraría fragmentada, de acuerdo con información difundida por el diario cruceño El Deber.
“Los parlamentarios no tienen una idea de lo que es la aplicación legislativa y la política en general. Se está pagando el costo de una degradación de la calidad política de nuestros representantes. No han querido entender algunos diputados y senadores, especialmente del ala radical del MAS que se oponen a todo, pese a que una norma está bien, pero ellos están mal. Actúan por una línea que ellos reciben”, reflexionó el analista, Pedro Portugal.
Según el portal digital de la Cámara de Diputados, en lo que va de esta gestión, de enero a abril, solo se aprobaron 12 leyes en esta instancia legislativa. Tres de ellas son referentes a créditos exigidos por el Ejecutivo, mientras que las demás son declarativas y una minoría está relacionada a inversión pública.
De acuerdo con las planillas de la Cámara Baja, cada diputado titular gana Bs 22.632 y los suplentes perciben Bs 7.544. El mismo monto va a los 18 supraestatales, que son nueve titulares y nueve suplentes.
Con esas cifras, en los cuatro meses de la presente gestión, el Estado habría desembolsado Bs 16.777.856 para pagar los sueldos de 130 diputados titulares y 130 suplentes, además de los nueve supraestatales titulares y nueve suplentes. Esta cifra, sin embargo, no toma en cuenta otros gastos individuales como el pago de viáticos, pasajes de avión o el desembolso para salarios de sus asesores.
POBRE GESTIÓN
Huaytari asumió la presidencia de la Cámara de Diputados el 8 de noviembre de 2023. Desde entonces se realizaron solamente seis sesiones plenarias. Así lo confirman las agendas legislativas publicadas en el sitio digital de esa instancia Legislativa.
Sin embargo, se observa que dos de esas sesiones plenarias fueron de Asamblea, de tal modo que solo hubo cuatro sesiones de diputados, algunas de las cuales fueron prolongadas a dos días.
Ante las críticas por una cuestionable gestión y su recurrente ausencia, el presidente de la Cámara Baja, Israel Huaytari, argumentó que desea “economizar”, puesto que cada sesión llegaría a costar más de 35 mil bolivianos, según declaró.
“No es conveniente llevar una o dos transferencias de terreno para una sesión; nosotros, casi 12 proyectos de transferencia hemos tratado en una sola sesión. Eso también significa economizar, es lo más estratégico”, afirmó el simpatizante de Arce Catacora.
Sin embargo, los 130 diputados titulares y otros 130 suplentes, además de los nueve diputados supraestatales y nueve suplentes, hacen un total de 296 diputados que cobran su salario indefectiblemente, con sesión o sin sesión.
Además, Huaytari se ve imposibilitado de instalar una sesión porque los opositores le exigen el tratamiento de los proyectos de ley 073 y 075, para la cesación de la autoprórroga de los altos magistrados judiciales. Un acuerdo que pretendía viabilizar este tema tampoco se cumplió. Por ello, los créditos que requiere el Gobierno están paralizados en la Cámara de Senadores.
“Vamos a flaquear porque: uno, las comisiones mixtas nos quitan a muchos parlamentarios que están trabajando por el tema de elecciones judiciales. Tenemos estas falencias”, matizó Huaytari, adelantando que no habrá sesiones hasta el próximo mes.
El diputado de la facción masista radical, Héctor Arce, culpó a Huaytari y al presidente de la ALP, David Choquehuanca, por la falta de organización en la Cámara Baja y por la desatención al tratamiento de normas.
“Se vio el fracaso y la falta de experiencia del señor Huaytari. Él solo responde a Choquehuanca y Luis Arce y solo hace un trabajo político; nunca realizó un trabajo legislativo, que es lo que debería hacer”, resaltó.
Por su parte, el ala “arcista” del MAS, también llamada renovadora, culpó a la facción radical de “boicotear” la gestión de Huaytari. El diputado, Rolando Cuéllar, manifestó que “ellos solo responden a Evo Morales” y aseveró que el veterano cocalero solo pretende “dañar” la gestión del presidente (Arce), al intentar hacerlos ver como unos “fracasados”.