En la región, en pleno Siglo XXI, aún se impone el canibalismo político. Una práctica de estilo revanchista, con la que se amedrenta, persigue y encarcela a los que piensan diferente, sin respetar las reglas del juego democrático. Acorde, posiblemente, con las instrucciones del denominado Foro de San Pablo, que instituyó en el pasado mediato, el Socialismo del Siglo XXI. Utilizando, para tal efecto, el sistema electoral e imponer, de manera subrepticia, el unipartidismo, que siempre ha sido soporte de las dictaduras. Solos marcaron la cancha y solos compitieron en ella, proscribiendo el pluralismo político.
El propósito fue implantar en Bolivia una ideología, similar a la del Foro de San Pablo, pero con rasgos de tipo indigenista, a fin de perpetuarse en el Poder. Por ese afán, argumentando un supuesto golpismo, fue encarcelada una mujer, que ejerció el gobierno con la aquiescencia del Legislativo. “Se deja una economía estable, sin devaluación. Y comparar con la gestión de la UDP, no viene al caso” (1), reiteraron, entonces, sus voceros. Ella no tuvo la ocasión de asistir siquiera al sepelio de su madre, que falleció hace poco.
El canibalismo político ha echado al ostracismo, en consecuencia, a centenares de personas, por haber divergido con los “enviados”, que fracasaron rotundamente. Pero los exiliados, pese a las condiciones adversas, no dejaron de trabajar, difundiendo ideas e ideales, en defensa de la libertad, en los países donde se refugiaron. Ese esfuerzo adquirió suficiente fuerza para desgastar al autoritarismo, hoy como ayer. Tuvo mucha repercusión en los países y gobiernos democráticos. Labor informativa que dio a conocer, las atrocidades de las dictaduras. Un trabajo persistente que ha corroído a dichos regímenes.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, “recordó –a propósito– la necesidad de garantizar el derecho a votar y a ser elegido mediante elecciones periódicas auténticas” (2), en Venezuela. Hizo tal afirmación ante el recrudecimiento de la persecución dictatorial en ese país, contra la oposición, con miras a las elecciones del próximo 28 de julio. He ahí el canibalismo político, que devasta a quienes son contestatarios.
“Hay los que sólo quieren la mera conservación de sus actuales posiciones y hay partidos en todo el mundo que, carentes de una concepción creadora, apelan a la fuerza para que los salve, ¿pero los salvará la fuerza? Las democracias sajonas se han defendido con los medios de la ley, dentro de sus instituciones, sin disolver los sindicatos, sin prisiones, sin cierre de diarios, teniendo confianza en el pueblo”, dijo Eduardo Frei Montalva (3).
En suma: habría que humanizar la política.
NOTAS
(1) “Gobierno proyecta crecimiento económico de 4,2% para 2021”. EL DIARIO, La Paz – Bolivia, 30 de octubre de 2020.
(2) “ONU condena persecución a la oposición en Venezuela”. EL DIARIO, 22 de marzo de 2024.
(3) Eduardo Frei Montalva: “Sentido y forma de una política”. Talleres Gráficos de Editorial del Pacifico S.A., Santiago de Chile, 14 de diciembre de 1951. Pág. 65.