Tras celebrarse el 15 aniversario del Estado Plurinacional de Bolivia, dos analistas advirtieron que se avecina una preocupante crisis económica y política, a lo que se suma un frente masista claramente dividido y aseguran que no hay razones para festejar.
Después de dejar atrás a la República, Bolivia conmemora el Día del Estado Plurinacional cada 22 de enero, reflejando un cambio desde la propia Constitución Política del Estado, con la intención de reconocer los diversos grupos étnicos del territorio nacional, además de recordar la llegada al poder del Movimiento al Socialismo.
A la hora de evaluar el Estado de Bolivia y del MAS, los analistas Paul Coca y Hernán Terrazas, coindicen, en advertir que hay una crisis económica y política, mientras el oficialismo enfrenta una división nunca antes vista desde 2006.
“No hay mucho que festejar. En lo político estamos divididos en todo sentido; no hay un norte político en el país. En lo económico es cada vez más evidente ver una recesión económica (…)”, expresó Coca.
Por su parte, Terrazas resume la situación de Bolivia como una situación económica “crítica” y de incertidumbre, luego de casi 40 años; además del “deterioro democrático”, acoplado a la crisis judicial actual, como principal componente.
Refiriéndose a la crisis económica, ambos analistas ven que esta situación es en parte una “herencia” o efecto de la bonanza, luego de 14 años de gestión de Evo Morales.
En su opinión, las consecuencias llegaron porque los recursos económicos obtenidos en esos años no fueron invertidos adecuadamente en diferentes infraestructuras. Además, las inversiones en exploración de campos gasíferos no fueron destinadas y la poca seguridad jurídica en Bolivia fueron otros factores.
Para ambos analistas, el futuro económico de Bolivia no es el mejor. La exportación de gas natural y sus reservas han caído, lo cual conllevó a la reducción de las Reservas Internacionales.(Agencias)
Coca define a este 2024 como un “año determinante” al estar previstas las elecciones primarias de frentes políticos y el Censo Nacional de Población y Vivienda, que lleva 12 años sin actualizar datos estadísticos nacionales.
Coca y Terrazas, a su vez, señalaron aspectos claros que diferencian al MAS que llegó al poder en 2006 y al MAS que se tiene ahora, el cual se encuentra dividido.
Coca afirmó que el MAS de años anteriores estaba “unificado” y representaba a un frente político lleno de sectores sociales que proclamaban a Morales como un líder indiscutible.
Luego el liderazgo de Morales se convirtió en caudillismo, al no definir un tiempo de retirada ni preparar a un sucesor, es la lectura del analista.
“Como sabemos, los partidos cuyos líderes se vuelven caudillos, tienden a desaparecer”, advirtió