Caso Marset expone a Bolivia como un país donde es fácil evadir la ley

Ante la expectativa generada a nivel internacional tras evidenciarse que el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, vivía sin mayores problemas en territorio nacional, la diputada por Comunidad Ciudadana (CC), Alejandra Camargo, lamentó que este caso exponga al país como un destino donde actividades y personas que operan al margen de la justicia pueden obtener refugio ante la incapacidad de autoridades.
Desde sus redes sociales, la legisladora representante de Cochabamba, afirmó que la fuga y los trabajos de búsqueda iniciados por autoridades para encontrar a esta persona en territorio nacional, son un nuevo bochorno que daña la imagen del país ante la comunidad internacional. “Nos pone bajo la mira de los medios internacionales”, señaló.
En ese sentido, cuestionó que los descuidos y la incompetencia demostrada por funcionarios de Gobierno, hagan que Bolivia sea considerada como un territorio donde personas involucradas en actividades ilegales pueden obtener refugio y vivir tranquilamente sin rendir cuentas por sus actos.
“Un descuido así es vergonzoso, pues expone a Bolivia como un país donde cualquiera que haya roto la ley puede contar con la incompetencia de nuestras autoridades para buscar refugio y evadir las consecuencias legales”, sostuvo Camargo.
En criterio de la asambleísta, la pregunta ahora es si autoridades nacionales tendrán la capacidad de emprender una lucha eficiente contra el narcotráfico y sus operadores, o continuarán anteponiendo intereses políticos, persecución y represión contra ciudadanos que no comparten la línea ideológica del partido de Gobierno.
“Nuestro presidente se ocupa de contentar a sus bases persiguiendo a opositores, y nuestro ministro hace su parte gasificando protestas en contra del MAS, en vez de capacitar a nuestra policía para que hagan un trabajo adecuado y no caer en estos errores deplorables”, sostuvo.
El pasado fin de semana, se dio a conocer que el ciudadano uruguayo Sebastián Marset, sindicado por ser autor intelectual en el asesinato del fiscal paraguayo antimafia, Marcelo Pecci, y otros delitos en Brasil, Uruguay y Paraguay, buscado por la Policía Internacional, vivía una relajada vida de lujos en territorio boliviano.
Las principales observaciones en este caso tienen que ver con la facilidad con que esta persona obtuvo certificados y documentos de identidad para permanecer sin problemas en territorio nacional, pese a su amplio prontuario criminal y los requerimientos en su contra a nivel internacional.
“Él pudo ingresar al país y conseguir documentos en 3 ocasiones con distintos alias, acceder a una cuenta bancaria y hasta dirigir un equipo de fútbol”, cuestionó la asambleísta.