Por Susana Gutiérrez
Unos más elegantes, sentadores y versátiles que otros fueron los looks que se vieron en la coronación del Rey Carlos III (74 años) y su esposa Camilla Rosemary Shand, la madrugada del sábado pasado, ante la mirada del mundo puesta en la Abadía de Westminster, en el corazón de Londres, en una solemne ceremonia que estuvo presidida por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, en la iglesia de Inglaterra.
En eventos de la realeza, los glamorosos estilismos femeninos se destacan, generalmente, por los tocados como se aprecia en esta edición.
- Reina Camilla
La reina Camilla eligió al diseñador Bruce Oldfield, quien confecciónó un fastuoso vestido blanco con bordados en oro y plata que incorpora un manto de armiño y una cola. Además, usó el Collar Coronación de la reina Victoria, una pieza cargada de significado. Engarzado para ella por la casa Garrard en 1858, lleva nueve diamantes procedentes de una insignia y de la empuñadura de una espada.
- Princesa de Gales
Kate Middleton se decantó por un vestido realizado en crepé de seda color marfil con lingotes de plata y bordados de hilo con motivos de rosas, cardos, narcisos y tréboles, flores que simbolizan las cuatro naciones del Reino Unido. La princesa de Gales complementó su look de Alexander McQueen, con una impresionante joya adorada por Isabel II. La princesa Charlotte lució el vestido similar al de su madre, con una corona de plata y flores de cristal de Jess Collet y Alexander McQueen.
- Reina Rania de Jordania
Rania llevó un total look marfil, diseñado por Tamara Ralph. Y calzados que estilizaron sus piernas, una cartera de mano a juego de Bottega Veneta. En cuanto a las joyas, se mantuvo sencilla con un anillo ovalado.
- Reina Letizia de España
Letizia eligió un traje sastre de color rosa y un bolso de Carolina Herrera, pamela en rafia natural abrigada por tul de plumeti de Balel y los pendientes de chatones de Victoria Eugenia.
- La primera dama de Estados Unidos
Jill Biden, la primera dama estadounidense y su nieta Finnegan Biden llegaron a la Abadía de Westminster, ataviadas en amarillo y azul.
- Matilde de Bélgica.
La reina Matilde, única de su generación que desciende de la nobleza, eligió un atuendo en rosa, apropiado vestido con capa en ese color con accesorios a juego y el toque de sofisticación que siempre da un choker de perlas.
- Mette Marit de Noruega
La princesa de Noruega, Mette Marit, dio una lección de elegancia con un sencillo vestido lápiz por debajo de la rodilla, con manga 3/4 y escote redondo cerrado adornado por un lazo no muy llamativo en uno de los hombros.
- Reina Máxima de Holanda
La reina Máxima llegó a la Abadía con un vestido blanco, modelo confeccionado en organza en manga larga y con cinturón a juego y en el que destacó el exquisito cuerpo con flores bordadas a mano que dejan parte del escote, hombros y espalda al descubierto.