Un auto con los vidrios quebrados y tiendas comerciales con sus puertas forzadas, ese era parte del panorama que se observó este jueves en la ciudadela Andrés Ibáñez, tras los enfrentamientos registrados en el Plan 3.000 entre bloqueadores y afines al Movimiento al Socialismo (MAS).
Uno de los vecinos afectados, que vive a 150 metros del Obelisco, denunció que forzaron el ingreso a su comercio y le robaron un televisor y varias bicicletas, además de destruir los materiales que tenía adentro.
”Esto es un robo y allanamiento a la propiedad privada. Cómo se puede invertir así”, cuestionó y descartó sentar una denuncia, pues considera que es un proceso costoso que no le devolverá lo robado.
Junto a este comercio, hay al menos otros cinco negocios que también tienen daños, principalmente en sus puertas.
En la misma zona hay un edificio que amaneció con gran parte de sus cristales en el frontis quebrados. Lo mismo pasó con un vehículo que se encontraba en la calle, todos sus vidrios estaban rotos.
PERDIÓ UN DEDO
Un hombre perdió un dedo de la mano izquierda tras enfrentamiento la noche del miércoles en el Plan 3.000 en Santa Cruz.
La pareja del sujeto, Ericka Barrero, aseguró que su esposo estaba camino a comprar cena cuando empezaron los enfrentamientos y en ese momento una granada de gas llegó donde él.
Barrero, afirmó que el hombre intentó, sin éxito, alejar la granada de él, pero esta explotó en su mano.
El hecho se registró la noche del miércoles en la zona central del Plan 3.000, calle 2. La mujer culpó a las personas que se asientan en el Obelisco de lanzar el artefacto. “Ellos lanzaron (al referirse a vecinos). Siempre sucede esto, cada noche lanzan (cohetes), no sé de dónde sacan y nunca se les termina”, señaló.
La mujer añadió que su esposo está internado desde la noche del miércoles y se prevé que esté dos días más en observación. Ante ello, la mujer pidió ayuda a la población para cubrir los gastos médicos de su esposo que se encuentra hospitalizado. (Santa Cruz, Unitel)
Foto: Unitel