Por: Lic. Héctor Molina Angulo
RECORDEMOS QUE…
Los Trastornos de Aprendizaje son aquellas dificultades de aprendizaje que se refieren a un grupo heterogéneo de trastornos, manifestados por dificultades significativas en la adquisición y uso de la capacidad para entender, hablar, leer, escribir, razonar o para los procesos lógico-matemáticos.
FACTORES QUE INTERVIENEN PARA EL DIAGNÓSTICO DE LOS PROBLEMAS DE APRENDIZAJE
Existe una diversidad de factores que intervienen para que aparezca un fracaso escolar o académico como resultado del proceso de aprendizaje. Muchos especialistas señalan la existencia de condiciones internas y externas en este proceso.
Dentro de las condiciones internas se pueden mencionar los factores relacionados con los aspectos neurobioló¬gicos u orgánicos; es decir, se refieren al sistema nervioso central (SNC) y, especí¬ficamente, al cerebro; o sea, “con qué se aprende”. Se debe tener en cuen¬ta también los aspectos psíquicos, que en muchos casos se presentan como la causa subyacente al bajo rendimiento escolar; es en este punto donde se estaría hablando de “quién aprende”.
Asimismo, dentro de las condiciones ex¬ternas, se debe tomar en cuenta los as¬pectos sociales que se refieren al “cómo se aprende” y “el ámbito en el que se aprende”. Es importante anotar que estos factores se implican mutuamente.
Las alteraciones del aprendizaje pueden deberse a la multiplicidad de facto¬res que intervienen en el mismo; es decir, a factores neurobiolóticos, a afectaciones emocionales o a organizaciones pedagó¬gicas alejadas de la realidad psicosocial de aquellos que transitan por dicho proce¬so. Por lo tanto la etiología del fracaso escolar se debe analizar desde distintas vertientes.
Los factores a considerar en el diagnóstico de los problemas de aprendi¬zaje son los siguientes:
Factores específicos
Encontramos cierto tipo de trastornos en el área de la adecuación perceptivo-motora, que son el conjunto de capacidades directamente derivadas y dependientes del funcionamiento del sistema nervioso central. Si bien parecen tener origen orgánico, no se tiene posibilidades de comprobarlo. Estos trastornos afectan el nivel de aprendizaje del lenguaje, de su articulación y lectoescritura. Aparecen un sinnúmero de pequeñas fallas, como por ejemplo la alteración de la secuencia percibida, dificultad para construir imágenes claras de fonemas, sílabas y palabras, etc. En ellas se puede encontrar también dificultades en el análisis y síntesis de los símbolos, en la capacidad sintáctica, en la atribución significativa. Algunos procesos dentro de las afasias pueden aparecer sin que podamos establecer su origen en un daño cerebral.
Muchos problemas de aprendizaje se encuentran relacionados con una indeterminación en la lateralidad. Partiendo del precepto aceptado en varios estudios sociales de que la norma es el uso de la mano derecha. La persona diestra en extremidades y ojo presenta una grafía más uniforme y armónica. En ese sentido, el niño zurdo se ve forzado a una decodificación precoz. El caso se complica más cuando hay una lateralidad cruzada; es decir, que los ojos y las manos no presentan una lateralización idéntica.
