En estos últimos meses he escuchado y leído por lo menos unas 10 veces hablar de la calidad de los eventos gratuitos versus eventos pagos.
Por supuesto, no podemos generalizar para dar una respuesta a quien infiere en que la calidad de un evento pagado vale más que uno gratuito. Sin embargo, nuestro buen criterio podrá ayudarnos a tomar una decisión que, por supuesto, nos beneficie, sin menospreciar a ninguno, aunque debo manifestar que parecería ser ese el fin cuando algunos se refiere a este tema, principalmente por la manera en la que se lo hace.
Debemos ser observadores, pueden existir factores fáciles de percibir como la competencia, que bien llevada es buena y me atrevo a decir que es positiva… donde hay competencia es fácil distinguir la calidad, cuando hay monopolio o por lo menos intención de un monopolio no podemos comparar si algo es bueno o malo, pero sí podemos pensar muchas otras cosas.
Decir que uno debe sacar conclusiones cuando tiene en frente un evento (X) gratuito y un evento (Y) pagado para tomar una decisión e inscribirse, debe estar sujeto al criterio de cada uno, al interés que tenga cada uno y generalmente el tamaño de la cartera, este último será uno de los factores más importantes, por lo que pensar en que el precio le dará la calidad no es lo más acertado.
Es posible que muchas personas, por alguna razón, se sientan limitadas para participar en cursos, seminarios, conferencias y otros sólo por no tener los recursos necesarios y hay profesionales, instituciones, organizaciones que piensan en este segmento de la sociedad, pues nadie está libre de experimentar esta situación que dicho sea de paso, nada es eterno.
Hay magníficos eventos gratuitos como hay los malos por supuesto, es por esta razón que no es bueno generalizar y nuestro criterio debe trabajar, pues también hay excelentes eventos pagados como también los que al finalizar nos hacen sentir estafados, además de pagar una suma considerable muchas veces no es lo que esperábamos.
Pero ¿Qué es lo que deberíamos considerar para tomar una buena decisión?
- Evidentemente, la institución u organización que realiza el evento.
- Quien patrocina y/o avala el evento, independientemente de que sea un curso o un congreso.
- También es sumamente importante darle una mirada a la experiencia de los facilitadores, disertantes, ponentes, hay algunos que realmente no existen, pero figuran con más de 30 años de experiencia… Facebook también es mágico pero ese tema es para otra ocasión.
- Analizar el contenido del curso u evento, que sea atractivo es importante, pero también hay que pensar cuan real puede ser.
También es interesante analizar la competencia cuando habla del otro, ahí uno puede ver la ética con la que se actúa. Si constantemente anda pinchando al otro debe ser por algo.
Mientras más caro sea, no es que vaya a ser mejor y mientras más barato sea tampoco es que sea malo.
El acceso a la educación debería ser gratuita según la legislación de varios países, por eso existe la educación pública, pero éste puede no ser el caso por tratarse de eventos privados y que, además, deben soportar la carga económica de la organización, tiempo y empeño para que salga bien, donde no se debe dejar nada al azar y, sin duda, esto tiene un costo, consideremos que hay personas por detrás, publicidad, alquiler de espacios entre otros.
Ahora, gracias al internet es fácil averiguar todo respecto a un evento, a los patrocinadores, facilitadores o como se les quiera llamar dependiendo el tipo de evento por supuesto.
Debemos valorar el empeño y compromiso que significa organizar un evento, hay una inversión importante de tiempo, recursos humanos y, sin duda, dinero. Si se trata de una empresa de eventos por supuesto que vive de eso y sería absurdo pretender que no cobren un monto, ese es otro tema.
Cuando es gratis hay dos opciones, o es muy malo o pretende desmonopolizar y hacer que determinados temas sean inclusivos y accesibles para todos, aun habiendo hecho una importante inversión, lo harán gratis incluso con certificación universitaria, lo que debe llamarnos la atención pues ¿Qué universidad está dispuesta a apoyar un evento que no reúne las condiciones necesarias para serlo? Si hablamos de una universidad estamos hablando de palabras mayores… es la garantía de la seriedad que necesitamos para tomar una buena decisión.
La decisión es de cada uno, pero por favor no siempre lo que se paga es bueno, como tampoco es malo lo gratuito, hay que ver el fondo, analizar ambas partes, si constantemente te hablo mal de la competencia es fácil tomar una decisión ¿Verdad?
Georgette E. Bretel de Aliaga
Escritora y experta
Ceremonial, Protocolo,
Etiqueta y Comportamiento Social
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