Rolando y su hijo Alberto Castrillo apretaron el acelerador a fondo en la primera prueba municipal de autódromo en Pucarani donde lograron ganar en sus respectivas clases, la RC2 N y la RC2N D.
En la víspera se dio por inaugurada la temporada tuerca en Pucarani que lleva el nombre de “Automovil Club Boliviano”, donde los Castrillo demostraron su vigencia en el automovilismo, tomando en cuenta que Rolando ha llegado a ser uno de los pilotos con mayor cantidad de títulos a nivel nacional y departamental, mientras su hijo está siguiendo con la tradición.
Mauricio Castrillo, otro de los hijos de Rolando, no pudo terminar la prueba debido a que tuvo un problema mecánico que originó que pierda el control de su vehículo por lo que se salió del trazado, abandonando inmediatamente la prueba debido a estos desperfectos. El hijo de Castrillo, sin embargo, no sufrió de lesiones de consideración, por lo que la familia terminó tranquila la jornada.
En la clase RC2 N, Rolando Castrillo se hizo del primer lugar con su bólido número 174, su hijo Mauricio le estaba pisando los talones pero al final abandonó la prueba por desperfectos mecánicos.
Mientras, Alberto Castrillo se hizo del primer lugar en la clase RC2 N- D, relegando al segundo lugar a Carlo Jiménez y a Marcelo Gutiérrez al tercero, completando el podio.
En la clase RC2 N-N, el primer lugar le correspondió a Juan José Iriarte, , mientras Martín Mamani fue segundo.
En la clase R2B Libre fue el turno de Horacio Toro quien fue el más veloz, seguido de Nelio Quiñajo.
En la clase R1B, el primer lugar le correspondió a Luis Ugarte, escoltado por Kevin Quispe y Michael Luna.
La clase invitada fue la 8 válvulas donde Andrés Otazo fue el más veloz.
EL DIARIO