A pesar de que el Gobierno asegura una inflación baja, los productos incrementaron su valor en el mercado nacional, debido al control y la subvención, que acerca a la economía nacional a una estanflación, de acuerdo con economistas.
La economía nacional presenta dos tipos de estadísticas, una está referida a las encuestas y otra a la experiencia de la gente que va al mercado todos los días, y ve que los bolivianos cada vez compran menos productos, según el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero.
Indicó que los controles y las subvenciones distorsionan el mercado nacional, pues los datos no muestran los precios reales de los bienes y servicios, sin embargo, la gente lo siente al ir al mercado.
“Si, distorsionan los precios reales de mercado, por lo tanto no se asignan recursos de manera óptima y no se tiene por ende, una real información para la toma de decisiones de los diferentes agentes económicos”, apuntó.
Si, la gente percibe su real poder adquisitivo no por las estadísticas, sino por los precios de mercado que van subiendo paulatinamente por la inflación nacional e importada, debido a una escasez de dólares latente, agregó.
En su momento, el economista y docente de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), Ernesto Bernal, observó el trabajo del Instituto Nacional de Estadística (INE), debido a que los datos que brindaban sobre la inflación distaban mucho de la realidad de los bolivianos.
A pesar del discurso del Gobierno sobre una inflación baja y que la estabilidad de los precios se mantiene, el economista Gabriel Espinoza expone datos que muestra que en los últimos años la cifra creció.
“Bolivia inflación a 12 meses, a marzo de cada año: Marzo 2021, 1,16%; marzo de 2022: 0.77%; marzo 2023: 2,53%; y marzo de 2024: 3,06%”, escribió en su cuenta de X, Espinoza.
Entretanto, Romero sostiene que en promedio el incremento del precio de los productos está entre 15% a 20%, sin importar si son bienes nacionales o importadores, provocado por la escasez del dólar.
De acuerdo a información del INE, en marzo la inflación alcanzó a 0,46%, mientras que la acumulada llegó a 0,74%, en comparación con similar período del 2023, los porcentajes se incrementaron, ya que en ambos casos registraron cifras negativas.
“Los datos de precios siguen alineándose a la consigna oficial de la inflación más baja en América Latina. En el trimestre de mayor escasez de dólares y bloqueo de caminos, los precios solo subieron en 0.74%. Llama la atención que en el mes de marzo, el transporte bajó de precio”, reflexionó en su cuenta de X, Gonzalo Chávez Álvarez.
Dólares
Romero incide en que el problema de la escasez de dólares, en la economía nacional, provocó que las importaciones legales e ilegales registren incrementos de precios y esta situación provoca que los productos de países vecinos sean más caros.
La economía nacional depende mucho de la importación de bienes y servicios, ya que el sector productivo sólo cubre un 40% de la demanda de bienes y servicios en el mercado nacional, según Romero.
También, Romero sostiene que los datos del INE pueden obedecer a su metodología y los datos que brindan a la población pueden ser ficticios, ya que está muy alejada de la realidad de los bolivianos.
Mientras tanto, el contrabando sigue creciendo por efecto de las devaluaciones que aplican los países vecinos a sus monedas y provoca que el boliviano pierda valor.
Por ejemplo, el boliviano ya perdió terreno frente al dólar, a pesar de que no se movió el tipo de cambio oficial de 9,86 para la compra y 9,96 para la venta, en el mercado paralelo la divisa se cotiza entre 8 a 8,30 bolivianos.
Estanflación
Romero opinó que existe la posibilidad de que la economía nacional ingrese en un proceso de estanflación, pues el crecimiento de la economía se sigue desacelerando, mientras la inflación va en ascenso.
Los datos de crecimiento del Gobierno indican que en la pasada gestión casi se llegó a un crecimiento de 3% y para la presente gestión fijó una cifra de 3,71%, mientras el Banco Mundial (BM), en su último informe sobre perspectivas, proyectó sólo 1,4%, mientras el Fondo Monetario Internacional (FMI) señala 1,6%.
Conflicto
Por otra parte, la situación en medio oriente pone en vilo al mundo, ya que de concretizarse las amenazas de guerra, provocarán un proceso inflacionario a nivel mundial, debido a que el valor del petróleo subirá y toda la economía está atada a este producto.
Para Romero un conflicto provocaría el incremento del precio del petróleo, lo que afectará a la economía nacional, debido a que subirá el gasto en la importación de combustibles, así como la subvención.