Se conmemoraron ayer ocho años desde el referendo en el que Evo Morales experimentó un revés en su intento de reelección por cuarta vez como presidente. La oposición marcó este día con declaraciones que resaltan la gesta ciudadana del 21 de febrero de 2016 y críticas al exmandatario.
La expresidenta del Estado, Jeanine Añez Chávez, actualmente detenida, expresó en redes sociales: «El #21F es una fiesta nacional de la democracia. El heroico pueblo boliviano celebra la gesta contra el intento de perpetuación del poder político de Evo Morales y sus seguidores, quienes buscaron cambiar la Constitución».
Desde la cárcel, el gobernador electo de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, añadió: «El 21 de febrero de 2016, el pueblo boliviano dijo NO a la reelección indefinida. El masismo recibió una bofetada y la mayoría nos quedamos con una sigla: ‘el 21F’, símbolo de democracia y libertad». Camacho consideró que el 21F fue el inicio de una «lucha victoriosa que se sellará en 2025».
En el referendo del 21 de febrero de 2016, la población votó en contra de cambiar la Constitución para permitir una reelección presidencial adicional. Sin embargo, tres años después, Evo Morales se postuló basándose en una sentencia del Tribunal Constitucional, y las elecciones resultantes fueron anuladas por acusaciones de fraude.
En coincidencia con el aniversario del 21F, el diputado de Comunidad Ciudadana, José Ormachea, solicitó formalmente el retiro del busto de Evo Morales de las oficinas de la Asamblea Legislativa, argumentando que es ilegal según la ley que prohíbe monumentos para personas vivas y considera el busto una «aberración» que fomenta el culto a la personalidad delirante.
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