Caudillismo en la política boliviana genera roscas y daña la democracia

Expresando su solidaridad con los legisladores que la semana pasada fueron separados de la bancada de Comunidad Ciudadana, la diputada Alejandra Camargo, apuntó a los caudillismos en los partidos políticos, como la causa principal para la generación de roscas de poder que obstaculizan la labor parlamentaria y degradan la democracia en instancias partidarias.
Camargo volvió a arremeter contra los caudillismos que lideran la mayoría de organizaciones políticas en el país, lamentando que la política en torno a liderazgos como el “arcismo”, “evismo” o “camachismo”, con sus respectivos círculos de poder, afecten y dañen la actividad partidista, además de impedir el surgimiento de nuevos actores.
“Este caudillismo en los partidos políticos bolivianos tiene que ver con la elección personajes ‘favoritos’, instrumentalizando la formación de roscas de poder que obstaculizan el desempeño adecuado de la actividad parlamentaria y la política boliviana”, indicó la asambleísta cochabambina.
En ese sentido, cuestionó una evidente degradación de la democracia al interior de las principales organizaciones políticas con representación en el Parlamento, precisando que es ese el origen de actitudes y determinaciones autoritarias.
“Se aplica el dedazo en todos los partidos políticos que son caudillistas lamentablemente, por eso tenemos que transformar la lógica de la partidocracia boliviana. Mientras haya un caudillo hay una rosca, mientras haya una rosca no hay democracia interna y siempre se van a aplicar los dedazos”, lamentó Camargo.
La asambleísta reiteró sus observaciones sobre la dirección de partidos y sus prácticas, adquiridas a lo largo de un dilatado paso por la esfera política nacional. “Los partidos están manejados por ‘boomers’, líderes que datan de la década del 50, y esto no tiene tanto que ver con la edad sino con las mañas adquiridas”.
Anteriormente, el diputado por la agrupación Creemos, José Carlos Gutiérrez, había manifestado que la oposición debe plantear y ser una alternativa, reconociendo que los caudillismos ya no van.
“La oposición tiene que reconocerse a sí misma, y tiene que reconocer que los caudillismos ya no van, y tiene que reconocer que la renovación va a ser positiva, y el acompañamiento de aquellos que han estado en oposición, que tienen experiencia, tiene que redireccionar el rumbo que la oposición no ha podido lograr hasta ahora”, expresó.
Gutiérrez además apuntó que uno de los actuales grandes problemas es que la oposición está siendo opacada por la división interna en el MAS. “Es urgente que la oposición reconozca sus propias debilidades, porque hay división generada por un caudillismo en contra de aquellos opositores que tal vez estén pensando en una alternativa real y viable”, concluyó.
Sobre la expulsión y acusaciones contra los ocho asambleístas cuestionados por la bancada de CC, la diputada Camargo reprochó que prácticas del “evismo” en sentido de lanzar acusaciones carentes de sustento, se repliquen en partidos cuya línea ideológica y proceder es abiertamente contrario a esta corriente, al menos en teoría.
“Hay ciertas personas en mi alianza que están teniendo estas mañas de acusar sin pruebas, no se puede mellar la dignidad de tus colegas sin comprobarlo”, finalizó, justificado así su inasistencia al acto programado por CC para definir a sus nuevas jefaturas de bancada.