Planes, proyectos y sueños para el litio

Desde tiempos en que se renunció a que una empresa alemana explote el litio de Uyuni, se hizo referencias a “propuestas, planes, proyectos y hasta ideas fantasiosas sobre la explotación del litio”; pero todo resultó vano y cuanto más tiempo pasó, fue más que suficiente para que Argentina y Chile emprendan la explotación de litio en sus territorios. Propuestas y planes pasaron por varios gobiernos, industriales mostraron mucho entusiasmo y hasta se aseguró que nuestro país es poseedor de “grandes reservas de litio en el mundo”; se dijo, ostentosamente, que somos capaces de proveer del rico mineral a cualquier país y todo quedó en teoría.
Han pasado años y nadie hizo algo concreto y definitivo. ¿Por qué tanto descuido y desidia? ¿Qué explicación podría dar el actual gobierno al respecto?, otros no avanzaron, a pesar de que prometieron mucho. Entendemos que el gobierno debe tener mucha correspondencia de quienes formularon planes y proyectos, entonces, que sean convocados ahora y expliquen qué es lo que habrían estudiado recientemente. ¿Hay planes y proyectos entregados por los “muy capaces de explotar grandes cantidades”? El Ministerio de Minas debería mostrar todo lo relativo al litio prometido y nunca explotado plenamente en nuestro país. En días pasados surgió la información de que “el gobierno estudiará nuevos precios para el litio”. ¿De qué precios se habla si casi no explotamos ese mineral? ¿O serán las cotizaciones vigentes en Argentina y Chile?
Mucho se habla y poco se hace. Las autoridades deberían explicar esta situación tan anómala y contraria a lo que interesa a toda la nación. No podemos seguir esperando convocatorias o licitaciones para ver, nacional o internacionalmente, quiénes explotarán el litio, tanto en Uyuni, Changolla y otros sitios del país donde se aseguró haber reservas importantes.
Planes y sueños proyectados no sirven si no son realizados. Es urgente vivir realidades y abandonar simples fantasías para que sigan jugando los políticos ingenuos, y sus descendientes, en cien o más años, emprendan lo que se debe hacer en el país con los yacimientos del litio, del hierro del Mutún, las joyas de La Gaiba y otros recursos preciosos que se sabe existen en el territorio nacional.