Mercado informal generó ocupaciones vulnerables

Los datos estadísticos oficiales dan cuenta que la desocupación bajó y subió la ocupación en los últimos meses, pero los economistas señalan que las personas que encontraron empleo en el mercado informal, son vulnerables, pues no cuentan con salario mínimo, seguro social y menos recursos para su jubilación.
Un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que la recuperación del empleo en América Latina no llega aún a los niveles de 2019, es decir antes de la pandemia, y en los últimos meses de la presente gestión, se contrajo el empleo formal.
«La significativa ralentización del crecimiento en 2022 impacta negativamente en la velocidad de la creación de nuevos puestos de trabajo donde, si bien los niveles de empleo regional están muy cercanos a los niveles de 2019, todavía no han retornado al mercado de trabajo todos aquellos que se retiraron en los momentos más críticos de la pandemia. Ello puede generar presiones alcistas sobre la tasa de desocupación», advierte el organismo internacional.
PIB por habitante previo a la pandemia
En 2021, América Latina y el Caribe mostró una significativa recuperación de la actividad económica. De acuerdo con las estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el Producto Interno Bruto (PIB) promedio regional creció 6,6% en 2021 (6,9% para el Fondo Monetario Internacional (FMI), a julio 2022, recuperándose parcialmente de la contracción de 6,9% (7% para el FMI) sufrida en 2020.
Sin embargo, el PIB por habitante de América Latina acumuló en el bienio 2020-21 una caída promedio de 2,6%, después de caer cerca de 8% en 2020 y crecer 5,6% en 2021. El documento de la OIT señala que 12 de las 20 economías de América Latina terminaron 2021 con un PIB por habitante inferior al de 2019, y en ellos está Bolivia. Sólo Chile, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Paraguay y República Dominicana habían recuperado los niveles prepandemia.
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, informó este domingo, que Bolivia registra un aumento de empleos en los servicios administrativos y de apoyo de 77.000 a 112.000 entre junio de 2021 al mismo mes de 2022, lo que equivale una subida del 45%. Similar mejoría hubo en otros sectores.
Mientras en agosto pasado, el ministerio de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, informó que Bolivia registró un aumento de empleos en los servicios administrativos y de apoyo de 77.000 a 112.000 entre junio de 2021 al mismo mes de 2022.
En ese mismo periodo se generaron 1,2 millones de nuevos empleos. En alojamientos y comidas aumentó de 411.000 a 490.000, lo que implica un 19%; de 562.000 a 629.000 en el sector manufacturero, haciendo un 12% de crecida; y de 170.000 a 215.000 en servicios de educación, que es un 26% de incremento, de acuerdo a datos oficiales.
En reiteradas oportunidades las autoridades del gobierno indicaron que el desempleo se redujo de 11,6 a 4,3% a la presente gestión.
Informal
Para el economista y docente de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), Ernesto Bernal, el 80% del empleo se encuentra en el sector informal, y sólo el 20% en el formal, tanto en empresas públicas como privadas.
Pero son vulnerables, asegura al indicar que las personas no cuentan con beneficios sociales, como aguinaldo, seguro social, pero la gente y, en algunos casos, ganan menos que el salario mínimo nacional.
Explicó que la gente genera ese tipo actividad económica en el mercado informal para sobrevivir, pues la economía nacional tiene problemas desde el 2014, cuando se inició la desaceleración, y la pandemia provocó la aceleración de la crisis.
Oportunidades
Otro dato que resalta en el análisis que realizó sobre el tema, es que la igualdad de oportunidades no es la misma para todos, en especial para los jóvenes quienes enfrentan una serie de obstáculos para insertarse en el mercado laboral.
Esa es otra gran preocupación, y el mercado laboral no lo va a resolver, y el que tiene que actuar es el Estado, y los que son más impactos por esta desigualdad de oportunidades son los habitantes del área rural, pues llegan a la ciudad a ocupar actividades menos rentables que las personas de las ciudades.
El mercado laboral no beneficia a todos, existen fallas, y tiene mecanismos para identificar a las personas de acuerdo a sus capacidades, pero también juega un rol importante los contactos que pueda tener la persona.
Por ello es importante que el estado sea promotor de la generación de empleo a través de incentivos a la inversión privada, para que puedan crear nuevas fuentes de trabajo formal, y una buena educación es vital para esta tarea, ya que está ligada al proceso de capacitar capital humano, reflexionó.
Pobre
Por otra parte, el informe de la OIT señala que la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos laborales da origen al llamado «fenómeno del trabajador pobre» que significa que las personas pueden vivir en situación de pobreza aun teniendo un empleo, incluso un empleo formal.
“Si bien ello no es nuevo en la región, asociado mayormente a la elevada informalidad laboral, en este contexto su incidencia se eleva significativamente. Más aun considerando que los niveles de empleo en varios de los países de la región han retornado a los valores pre-pandemia o están cercanos a ellos, pero con menores ingresos laborales reales más bajos que en aquel momento”, sostiene el documento.
De esta manera los impactos negativos sobre los ingresos familiares promedio y sobre la distribución no sólo implican importantes retrocesos en las condiciones de vida, sino que demandan, aún más que en el pasado, la implementación y fortalecimiento de diferente tipo de políticas, agrega.
Como fue señalado, en algunos países de la región el empleo formal ha registrado un bajo dinamismo o incluso contracciones durante el primer semestre de 2022. Es por ello que las políticas de sostenimiento y creación de más y mejores empleos, especialmente de empleos formales, recobran aún más importancia. Por ello sostiene que el diálogo social adquiere un rol clave para permitir transitar este sendero atendiendo las necesidades y posibilidades de trabajadores y empleadores.