Luego de acudir al llamado para que exmandatarios manifiesten su apoyo a la expresidenta del Estado, Jeanine Añez Chávez, que mantiene la extrema medida de la huelga de hambre ante su situación y proceso irregular, el expresidente Carlos Mesa Gisbert, sostuvo que desde el gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) se hace uso de las cárceles para ejercer el terrorismo de Estado contra opositores.
La jornada pasada, desde la puerta del penal de Miraflores, el exmandatario atendió las consultas de medios de comunicación que acudieron a estas instalaciones para conocer sobre el estado de salud de Añez, tras haber sufrido una descompensación durante una audiencia, cerca al mediodía.
En la oportunidad, Mesa, luego que su ingreso al penal fue impedido, condenó la situación a la que se ha llegado a causa de la persecución política ejecutada por el poder, llegando al grado de usar el sistema penitenciario como un instrumento para aplicar el constantemente denunciado “terrorismo de Estado”.
“Estamos ante una evidencia vergonzosa, lamentable y que muestra exactamente el tamaño vergonzoso en el que está moviéndose el Movimiento al Socialismo, que utiliza las cárceles como un espacio de acción de terrorismo de Estado”, expresó el líder opositor.
Mesa además puntualizó que este proceder se convierte en una acción que más allá de la justicia busca amedrentar y someter a opositores y en el caso de Añez está basado en actos arbitrarios que carecen de sustento legal.
“Es obvio que está detenida ilegalmente, no hay ningún argumento que justifique su presencia en la cárcel, es obvio que el MAS quiere un trofeo de guerra, así de vergonzoso es esto”, dijo.
Similares criterios ya habían sido expresados por el senador Henry Montero, quien denunció que el oficialismo pretende convertir a la ciudad de La Paz en un campo de concentración de ciudadanos cruceños, esto por el pedido de legisladores para trasladar casos judiciales, por hechos de corrupción en la ciudad de Santa Cruz, a la sede de Gobierno, dejando de lado la labor de jueces y fiscales que desempeñan sus funciones en cada región de forma independiente.
La jornada pasada y mediante redes sociales, Carolina Ribera, hija de Añez, pidió que expresidentes visiten a su madre, señalando que gracias a su intervención en 2019 se salvó la democracia. “Imploro a los expresidentes Constitucionales y a las autoridades democráticas que visiten a mi madre y se cercioren de su grave estado de salud (…). Jeanine Añez salvó la democracia, sálvenla a ella”, expresó.
DESCOMPENSACIÓN
En medio de una audiencia por el caso denominado “golpe de Estado I”, Jeanine Añez se descompensó en su salud, por lo cual el juez determinó suspender el acto y postergarlo hasta el lunes 21 de febrero.
En esta audiencia se debería definir la situación de Añez, tomando en cuenta que ya ha fenecido el plazo de su detención preventiva en este proceso.
En el caso “golpe I”, Añez fue detenida en marzo de 2021. La justicia le dictó primero cuatro meses de prisión preventiva, pero luego amplió ese plazo a seis meses y posteriormente a 11 meses.
El plazo de la detención preventiva del caso “golpe I” se cumplió el 13 de febrero, por lo cual la defensa de Añez esperaba que se dicte su libertad.
En el transcurso de dicha audiencia que se realizó de forma virtual, Añez demostraba debilidad y dolor en sus gestos. Incluso no pudo sostener una taza de agua.
Si bien la asistencia médica señalaba que se podía recuperar a Añez para llevar adelante la audiencia, la abogada Norka Cuéllar, dijo que la exmandataria estaba muy mal, débil y casi se desmaya.
La defensa de Añez pidió suspender la audiencia y el juez dispuso reprogramar el acto procesal hasta el lunes a las 15:00 horas.
Añez lleva nueve días en huelga de hambre. Poco antes de la audiencia, fue revisada por su médico, quien indicó que está delicada, pero no requería una internación.
