La revista “Variety” asegura que Warner ha pagado a los herederos de Bowie más de 250 millones de dólares (221 millones de euros) por el catálogo del músico fallecido en 2016.
El amplio catálogo musical del británico David Bowie, que abarca desde finales de la década de 1960 hasta poco antes de su muerte en 2016, ha sido vendido a Warner Chappell Music.
El stock musical incluye más de 400 canciones, entre ellas “Space Oddity”, “Ziggy Stardust”, “Fame”, “Rebel Rebel” y “Let’s Dance” en 26 álbumes de estudio de Bowie lanzados durante su vida, así como un álbum de estudio póstumo, Toy, dos álbumes de Tin Machine, y también pistas lanzadas como sencillos de bandas sonoras y otros proyectos.
Según la revista “Variety”, Warner habría pagado a los herederos de Bowie más de 250 millones de dólares (221 millones de euros) por el catálogo del músico fallecido en 2016, a los 69 años de edad.
Warner Chapell es la división musical de Warner Music Group Corp. Bruce Springsteen vendió su catálogo a Sony Music el mes pasado, por 500 millones de dólares, según reportes. Entre otros que han vendido sus catálogos en los últimos años, ya sea en parte o en su totalidad, están Bob Dylan, Neil Young y Stevie Nicks.
El acuerdo alcanzado con el patrimonio de Bowie ha sido anunciado a menos de una semana de que hubiera sido su 75 cumpleaños, 8 de enero, y que se ha celebrado con la apertura de dos tiendas con mercadotecnia del británico en Londres y Nueva York, y con la publicación en noviembre de la colección de discos “Brilliant Adventure (1992-2001)”.
Sobre David Bowie
David Bowie, nacido en 1947 en Londres, como David Jones, murió en enero de 2016, después de luchar contra el cáncer durante 18 meses. Como artista, Bowie tuvo una gama impredecible de estilos, fusionando el cinismo y hastío europeo con los ritmos estadounidenses, así como sus personajes y vestuarios siempre cambiantes.
El delgado y erudito Bowie aportó una abierta teatralidad y androginia a la música popular que cambió el significado mismo de ser un astro del rock. Fue incorporado al Salón de la Fama del Rock & Roll en 1996.
El año pasado, Warner Music Group había llegado a un acuerdo con los administradores del patrimonio de Bowie, para otorgarle a Warner Music la licencia de los derechos mundiales del catálogo de la música que grabó Bowie desde 1968.