Luca de Meo, aún al frente de Renault, lanzó una dura advertencia sobre el futuro del sector automotor si las regulaciones medioambientales continúan endureciéndose. La declaración llega tras anunciar su salida de la industria, luego de décadas de trayectoria y de haber liderado una profunda transformación en el grupo francés.
En una entrevista concedida al medio alemán Welt, De Meo expuso su inquietud frente al lento avance del mercado eléctrico. Señaló que los vehículos eléctricos representan actualmente solo un 16 % del mercado global, una cifra insuficiente —a su juicio— para alcanzar los objetivos establecidos por la Unión Europea de cara a 2035.
“El mercado de los coches eléctricos avanza a la mitad del ritmo necesario. Si las regulaciones no se ajustan, podríamos ver una contracción masiva del mercado. Una prohibición total de los motores de combustión podría desencadenar un colapso, especialmente en países como Italia, España o Polonia”, afirmó.
De Meo también criticó que la carga del cambio recaiga exclusivamente sobre los fabricantes de automóviles. A su entender, muchas de las condiciones han cambiado desde que se fijaron los objetivos climáticos actuales, pero las normas y sanciones no han evolucionado en consecuencia.
Recalcó que la transformación debe ser compartida con otros sectores, y abogó por un entorno normativo más flexible. De no realizarse ajustes, advirtió, se pondría en riesgo la estabilidad de toda la industria en varios países europeos.
Su despedida de Renault y salto al mundo del lujo
El Consejo de Administración de Renault, bajo la presidencia de Jean-Dominique Senard, reconoció el papel decisivo de De Meo en el relanzamiento del grupo y anunció que su salida será efectiva a partir del 15 de julio de 2025. Hasta entonces, continuará al mando de la compañía.
Pero su carrera no se detiene ahí. El grupo Kering, propietario de Gucci, ha confirmado que Luca de Meo será su nuevo CEO a partir de septiembre. La empresa, que también controla marcas como Balenciaga y Yves Saint Laurent, busca aprovechar su experiencia y visión estratégica para impulsar una nueva etapa de crecimiento.
Según informó Kering, las funciones de dirección se separarán: François-Henri Pinault seguirá como presidente, mientras que De Meo asumirá la gestión ejecutiva del conglomerado de lujo. “Su profunda comprensión de las marcas lo convierte en el líder ideal para esta nueva etapa”, declaró Pinault.