Una oleada de catorce atentados con explosivos y carros bomba estremeció este martes al suroccidente de Colombia, dejando al menos siete muertos y decenas de heridos, según reportes preliminares.
Los ataques ocurrieron desde la madrugada en Cauca, Valle del Cauca y Buenaventura, afectando infraestructuras civiles, estaciones de Policía y zonas residenciales.
El primer estallido se registró en El Bordo, seguido por ataques en Corinto y Buenaventura, y posteriormente en Cali, Jamundí, Morales y otras localidades. Autoridades investigan la presunta autoría de disidencias de las FARC, particularmente del frente ‘Iván Mordisco’.
Las explosiones, algunas seguidas de ráfagas de disparos, provocaron graves daños materiales, el cierre de vías clave y pánico en la población. Entre las víctimas figuran civiles, patrulleros y transeúntes, mientras que las fuerzas armadas han reforzado la seguridad en la región.
Según el Ministerio de Defensa, los ataques serían una acción coordinada en homenaje al abatido cabecilla guerrillero alias «Mayinbú». Aunque algunos atentados aún no han sido oficialmente confirmados, se teme que la cifra de muertos aumente en las próximas horas.