La Organización Mundial de la Salud (OMS) realizó un ejercicio llamado «Ejercicio Polaris» donde simularon un brote de un virus ficticio llamado «viruela del mamut» que se propagó globalmente.
Este virus se liberó hipotéticamente después de que científicos excavaran restos de mamuts lanudos en el Ártico. La simulación mostró que los sistemas de salud mundiales se desbordaron rápidamente.
La OMS advierte que una nueva pandemia es una «certeza epidemiológica» y podría ocurrir en cualquier momento.
El deshielo del permafrost en el Ártico debido al cambio climático podría liberar patógenos desconocidos para la medicina moderna, y científicos y buscadores de marfil están excavando restos antiguos sin tomar las precauciones sanitarias adecuadas.