Cacería de brujas trata de involucrar a defensores de la democracia en 2019

El líder de la primera fuerza de oposición, Carlos Mesa Gisbert, afirmó que los casos por el supuesto golpe de Estado, son una “cacería de brujas” promovida por el Movimiento al Socialismo (MAS) para inculpar en un delito inventado a los ciudadanos que se levantaron contra el fraude electoral y defendieron la democracia en 2019.
En un breve contacto con la prensa, Mesa afirmó que las investigaciones por el caso del supuesto golpe se tratan de una maniobra del MAS para procesar a los ciudadanos que se movilizaron tras el fraude electoral en defensa de la democracia y contra el abuso de poder.
“Es una cacería de brujas para tratar de involucrar al conjunto de personas que defendimos la democracia durante 21 días”, sostuvo el exmandatario, asegurando que se trata de un orgullo el representar al pueblo boliviano que protestó en 2019.
A tiempo de brindar el apoyo respectivo y acompañar al diputado Carlos Alarcón, quien la pasada jornada fue citado a declarar ante la Fiscalía por el caso “Golpe I”, Mesa reiteró su postura de descalificar un proceso al que calificó como inventado.
“Se trata de un proceso que no tiene nada que ver con la realidad, es un proceso inventado, golpe I y II, además de la injusta detención y condena de la expresidenta Jeanine Añez y lo que va a ser el intento de acusación falaz sobre un hecho que no ocurrió”, dijo, destacando la trayectoria impecable de Alarcón.
Tras presentarse a prestar declaración, el parlamentario de CC afirmó no haber sido consultado por ningún aspecto referido a actos de terrorismo o similares, que es la figura en la que se basa este proceso. Por el contrario se hizo énfasis en las reuniones sostenidas en predios de la Universidad Católica entre líderes políticos y representantes de la comunidad internacional que facilitaron el proceso de pacificación del país.
“Lo más sorprendente es que este proceso se basa en el tipo penal de terrorismo, y de todas la preguntas que me han hecho ninguna se refería a esta figura. (…) solo se referían las preguntas a reuniones convocadas por la Iglesia Católica y reuniones en las que participaron representantes de la Unión Europea, del gobierno Español y las propias supuestas víctimas del inexistente golpe de Estado que eran las representantes del MAS”, dijo.
Por ello, Alarcón insistió en que el proceso denominado “Golpe I” solo busca encubrir los delios de Evo Morales y Álvaro García desde el fraude en los comicios de 2019 hasta su huida del país, abandonando funciones antes que la ALP analice sus cartas de renuncia.