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Brasil afina la puntería con la mira puesta en Bolivia

El equipo que dirige Tité apunta con lo mejor que tiene al encuentro debut en el certamen, alistan su dispositivo para el cerrojo nacional.


Tite medita algunas jugadas en el campo de entrenamiento, con miras al debut. (FOTO EFE)

La selección brasileña ejercitó ayer martes su poder ofensivo en el estadio Pacaembú de Sao Paulo, pendiente del estado de salud de Arthur, ausente por un golpe en la rodilla derecha que le hace ser duda para el debut en la Copa América frente a Bolivia.

El centrocampista del Barcelona se quedó en el hotel de concentración para continuar con su tratamiento médico y tener así alguna opción de llegar en condiciones al partido inaugural, que se jugará el próximo viernes en el estadio Morumbí.

La presencia de Arthur en el once titular de la Canarinha dependerá de la evolución del jugador en las próximas 48 horas.

Arthur se retiró lesionado en el minuto 30 del amistoso de preparación frente a Honduras del pasado domingo tras recibir una dura entrada -el infractor fue expulsado con roja directa-, si bien las pruebas a las que se ha sometido hasta la fecha descartan una lesión grave, según la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

No obstante, la federación tampoco ha aclarado el alcance exacto de la misma.

El seleccionador brasileño, Tite, tiene hasta el próximo día 13, un día antes del debut, para cambiar a jugadores de su lista de 23 convocados, siempre y cuando la comisión médica de la Conmebol avale la sustitución.

Por otro lado, el central del París Saint-Germain Marquinhos, tampoco estuvo en la práctica de este martes y, al igual que Arthur, permaneció en el hotel siguiendo diferentes trabajos de recuperación.

Salvo esas dos bajas, Tite contó ayer con todos sus efectivos para la sesión abierta de este martes que tuvo además la participación de seis jugadores de la base del Corinthians.

El técnico se centró principalmente en las jugadas de ataque, anticipando el más que probable cerrojo que impondrá la selección boliviana en el Morumbí.

La estrategia de Tite, por lo que se apreció en esta sesión, pasa por abrir el juego a las bandas, cambiar rápido la orientación para descolocar a la defensa rival y buscar el espacio al trío atacante.

Después el grupo se dividió en dos y se enfrentaron entre sí en un campo de dimensiones reducidas.

Tras el debut contra Bolivia, Brasil jugará el segundo partido frente a Venezuela en el Arena Fonte Nova de Salvador, en el noreste del país, y volverá a la capital paulista para cerrar la fase de grupos en el Arena de Corinthians ante Perú.

EFE

 
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