ARQUITECTURA

Al rescate de la arquitectura vernácula

Por esencia la casa aymara es cuadrada con espacio abierto, alrededor tiene algunas construcciones, es muy típico en esta cultura. Mientras que en Tiwanaku utilizan el doble muro para darle mayor termicidad al ambiente, pero ambas culturas son totalmente diferentes” asevera.


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Mucho se habla de construcciones ancestrales, más conocidas entre los arquitectos como vernácula, que además refiere a la utilización de materiales de la región y construida sin la intervención de arquitectos profesionales, siendo que cada vez las mismas tienden a desaparecer con la incorporación de nuevos materiales como también la colaboración de la comunidad para sus edificaciones, llegando al individualismo.

La arquitectura vernácula, es muy ancestral y sus orígenes están en el pasado y durante años se fueron prolongando en el altiplano, valle y el mismo trópico. Son arquitectos natos en vivienda, utilizando materiales del lugar.

“El estudio que se hizo es para rescatar justamente este tipo de arquitectura, porque se está perdiendo e introducen la calamina, ladrillo que es muy negativo para las construcciones vernaculares”, sostiene el arquitecto Javier Escalante junto a un equipo de profesionales, efectuaron un registro de este tipo de arquitectura en el país.

Escalante, agrega que la arquitectura a la que se hace referencia, se adapta a su forma de vida y necesidades, clima e incluso es paisajista, “bajo estas premisas hemos investigado la relación que tienen naturaleza-hombre, mostrando un apropiación del espacios, utiliza los recursos naturales como los materiales que se encuentran a su alcance, finalmente transforma el lugar. También hemos analizado hombre-sociedad y mucho tiene que ver de la forma como se organiza para realizar un urbanismo en su hábitat, donde vemos el modo de vida que lleva mediante sus sistemas de producción. Otro aspecto es hombre-ideología, ya que esta condiciona la forma de vida, si es religiosas, teocrática, militarista y esto provoca la forma de vida de las personas al construir templos, tumbas o fortalezas. Incidimos en hombre-tecnología, pues a mayor grado de desarrollo y civilización tendremos las introducción de nuevas tecnologías, no es los mismo que construir en otros países que utilizan otros materiales”.

Finalmente hombre-economía que influye muchos en el movimiento de las personas y que ese tipo de arquitectura vernácula se convierte en la arquitectura emergente actualmente y se viene desarrollando en las ciudades para mostrar estatus, poder económico y de esa manera evolucionó en el tiempo.

ASOCIADO CON LA ECOLOGÍA

Efectivamente la arquitectura vernácula está muy asociada a lo ecológico, debido a que se utilizan materiales del lugar “por ejemplo hemos rescatado la vivienda del altiplano, donde se puede observar la agricultura relacionado con la vivienda que se construye por lo general de manera rectangular. En cambio en sociedades con una economía basada en la ganadería son circulares las viviendas”.

MATERIALES

Se ha visto en el altiplano y en otras regiones que utilizan para construir sus viviendas los materiales de entorno, barro, cañahuecas, madera, piedra, paja u otros. Lo que implica que cada región se acomoda al material que está a su alcance.

Generalmente la vivienda rural, no ha sufrido muchas modificaciones luego de más de tres mil años, continua su forma de vida, especialmente en aquellas comunidades alejadas.

“Otra cosa es la decoración que se hace en la nueva arquitectura y se pretende forzar, mostrando que es cultural y no es tan cierto, porque toman estilos de imágenes que no son muy propias; en realidad es una mezcla, intentando mostrar un cierto rescate de culturas pasadas. Las casas actuales aymaras, son de comercio, fiesta, departamentos y en la terraza el dominio del dueño, visiblemente asociado al poderío económico, pero esto no tiene nada que ver con la arquitectura vernácula, pese a que tratan de forzar como una vivienda andina, no hay tal relación. La arquitectura vernácula es más sencilla y funcional”, afirma.

AL RESCATE

El entrevistado revela que la idea del estudio es rescatar la arquitectura vernácula, porque está apunto perderse, eso no es bueno; muchas comunidades ya han modificado sus viviendas, porque los usos y costumbres cambiaron. Antes para construir una casa participaban toda la comunidad, las mismas dedicadas a parejas, ahora es al revés, es totalmente individual. Ellos recolectaban materiales construían para matrimonios.

¿ES CULTURAL?

Puntualiza que la vivienda en el campo es para pernoctar y su área social la hacen afuera, no es de otra manera, “claro ejemplo de lo que digo es que en la ciudad de La Paz, se hacen mercados modernos y la gente prefiere vender afuera de la infraestructura en el suelo. Entonces al parecer esto es cultural y lo mismo ocurre con sus fiestas que ocupa las calles y quienes primero detectaron este comportamiento fueron los curas en las iglesias, afirmando que era complicado mantener encerrado a los indígenas y es por eso que gran parte de los templos tienen un atrio, abierto, gigante y en su mayoría son simples capillas de dimensiones no muy grandes, esto nos falta entender. Muchas veces tratamos de encerrarlos en complejos o departamentos.

En el aspecto económico ha provocado ciertos cambios en las construcciones de los aymaras, por lo general son comerciantes en lo informal, y en este momento están en el boom de este negocio. Esto ha modificado sus viviendas, como se conoce, está la fachada y por dentro es un desorden, aunque hay que reconocer, va en mejora.

 
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