BIENESTAR

Secretos caseros contra el estrés

Eugenia Tavano


 GALERÍA(3)

Lo repetimos como un mantra: “no se puede vivir así”, “Tengo que parar”. Más allá de la situación personal de cada uno, es indudablemente cierto que la vorágine de la vida social muchas veces nos ahoga y nos confunde. Gran parte de ese desconcierto nos lleva a naturalizar hábitos y comportamientos que no nos hacen para nada bien y que son perfectamente evitables. El tiempo que estamos en casa tendríamos que aprovecharlo para frenar el caos mental, hacer lo que nos gusta, mimarnos más. Como ya sabemos, lo esencial es la voluntad de cambiar. En esta nota te acercamos algunas ideas para que tu hogar vuelva a ser tu refugio, un espacio para el descanso, el ocio y la diversión.

-ESPACIO SAGRADO

Parece obvio, pero no lo es: a nadie le gusta estar en un lugar feo. Tu casa puede estar más o menos desordenada pero tener flores, plantas, un sillón en el que te encante leer, objetos que la alegren. No es cuestión de dinero, sino de ganas, y está comprobada la enorme influencia de los colores, aromas y formas sobre los sentidos. Deshazte de lo que no te gusta, mueve los muebles de lugar, inspírate para decorar y no postergues arreglos, ni aun los más pequeños.

-NO INVADIR LA INTIMIDAD

Una de las actitudes más nocivas es llevarse los problemas a casa; si en la cena repasamos todas las complicaciones de la jornada laboral, las vivimos dos veces. Dediquemos los momentos compartidos a escuchar al otro y a “sentirnos” realmente juntos. Si estamos solas, no corramos al teléfono a contar cuán difícil nos resultó el día. Apaga el celular cuando llegues o al menos cuando decidas empezar a relajarte. Haz lo mismo con la computadora. No es sólo cuestión de cortar con las obligaciones, sino también de frenar el estímulo lumínico de los monitores y las pantallas, ya que alarga nuestro estado de vigilia y por ende, retrasa el sueño.

-CALMAR A LAS FIERAS

Salvo que pasen el final de la serie que ves o esa película que tanto esperaste, intenta ver menos televisión (¡sobre todo noticieros!) y escuchar más música. Además de tus artistas favoritos, puedes disfrutar de música del mundo, sonidos de la naturaleza, mantras, etc. Es la manera más sencilla de “mover” la energía y todo se puede bajar de internet.

-TIEMPO AL TIEMPO

Si ya estás en casa, ¡para de correr! No intentes cocinar mientras separas la ropa por colores, vigilas que los chicos hagan los deberes y hablas por teléfono. Es más, esa hiperactividad redunda en ineficacia: la comida se quema, mezclas las prendas… Aprende a priorizar las tareas, ¡y a disfrutarlas! “La vida es eso que pasa mientras estás haciendo otros planes”, dijo John Lennon. Mejor, siéntate con los chicos, pregúntales cómo les fue, repasen juntos lo que tienen que hacer y si realmente la cena no puede esperar, invítalos a la cocina y acompáñalos mientras, con todo tu amor, te encargas de la comida.

-PASO A PASO

El cuerpo y la mente no funcionan de manera automática; para aflojar tensiones y dormir bien hay que “bajar” de a poco. Sácate el make up y vístete con ropa suelta y suave mientras escuchas una música tranquila. No te sientes a comer apurada, ni mucho menos comas mientras haces otra cosa. Date tu tiempo para saborear, no ingieras alimentos pesados y, sobre todo, no te acuestes enseguida después de haber comido (tiene que haber transcurrido al menos una hora y media).

-SÓLO PARA VOS

Pueden ser dos horas, una, un ratito. Dedica al menos una parte del día a hacer algo que te gratifique. Leer, jugar con los chicos, hacer el amor, dibujar, mirar una película... Tú sabes mejor que nadie qué cosas te dan mucho placer y deberías ser tan responsable con eso como con tus otras ocupaciones.

-PARTE DEL AIRE

Los ejercicios de respiración son ideales para relajarte. Hay muchos, pero puedes empezar por el siguiente. En silencio o con música muy suave acuéstate sobre una colchoneta (si tienes piso de madera puede bastar una manta) y cierra los ojos. Suelta el peso de tu cuerpo sobre el piso. Deja que la respiración se vuelva cada vez más profunda y lenta. Detecta las zonas de tu cuerpo que están tensas e intenta relajarlas. Poco a poco, visualiza cómo el aire circula a través de tu cuerpo, abriendo las zonas “cerradas” o atrofiadas. Sentí cómo entra por tu nariz, se desparrama por la frente, sigue hasta la coronilla, se derrama por toda la cabeza, baja por la columna y se expande por los brazos, abdomen, piernas y pies hasta sentir que se escapa, como un hilo invisible, por las plantas. Quédate disfrutando de ese estado. Cuando lo necesites, levántate del piso por un costado. Si te cuesta mucho concentrarte, puedes empezar haciendo un sonido profundo con la voz y la boca cerrada e ir tornándolo cada vez más grave, como si quisieras empujar la voz hacia los pies. Apoya tu mano en la parte del cuerpo, donde sientas que resuene tu voz (por ejemplo, el pecho) y luego trata de llevarla cada vez más abajo.

-PURIFICACIÓN POR LAS AGUAS

Una buena ducha o baño de inmersión pueden obrar milagros en el ánimo y en las contracturas. Hay aceites y sales que te ayudan a descontracturarte y muchas recetas caseras para mejorar, por ejemplo, la piel (como colocar una bolsita con salvado de avena en el agua). Puedes prender unas velas o bajar mucho la iluminación si estás segura de que no vas a dormirte… Y si estás en pareja ¡comparti la experiencia!

-LA ALMOHADA SAGRADA

El cuarto es el lugar de descanso por excelencia. Expulsa de la cama la notebook, el celular y la televisión. Decóralo como más te guste pero sin recargar. Puedes colocar bolsitas de lavanda debajo de las almohadas y aromatizar con humidificadores y hierbas (lavanda, romero) o bien sahumerios al aceite, que debes apagar antes de meterte en la cama. Al sueño también hay que ayudarlo: conviene que al menos una hora antes de dormir ya estés vestida para acostarte y con la mente en calma.

Y a la hora de arrancar…

Hay que evitar “levantarse con el pie izquierdo”. Por empezar, ¡no saltes de la cama! Deja que el día entre de a poco en tu conciencia (los ruidos, la luz, los pensamientos) y desperézate como hacen los gatos para poner a circular la energía. Agrega una media hora más a tu rutina de preparativos para evitar “salir corriendo”. Es importantísimo hacer un buen desayuno equilibrado y es el momento del día ideal para meditar, hacer yoga o seguir una rutina física.

-NADA DE NADA

A las palabras hay que darles el valor que tienen. Si decidimos “no hacer nada” ¡no hagamos nada! Ocupar el fin de semana ordenando placares o corriendo detrás de las ofertas puede ser útil, pero nada ocioso. Reserva al menos un día para desconectarte de cualquier tipo de obligación y compromiso..

 
Revistas
Publicidad
Portada de HOY

JPG (513 Kb)


Publicidad

Sociales

CONCIERTO DE CÁMARA EN EL CÍRCULO DE LA UNIÓN

La Orquesta de Cámara Juvenil de Bolivia Clásica junto al clarinetista Lucas Viscarra.

TORNEO DE GOLF EN MALLASILLA

Horacio Eber, Franco Urquidi, Fernando Pardo, Tomás Barrios, Miguel Navarro y Carlo Carrasco.


Cotizaciones
1 Dólar:6.96 Bs.
1 Euro:9.40 Bs.
1 UFV:1.94355 Bs.

Impunidad